Adiós a Akira Toriyama

Sayonara, Toriyama-san

Nos ha dejado Akira Toriyama, el creador de Dragon Ball, uno de los autores más respetados y queridas del mundo del manga y el anime

Desde sus inicios humildes en 1984, la serie creada por Akira Toriyama ha dejado una marca indeleble en la cultura popular, tanto a nivel mundial como en nuestro país siendo este uno de los primeros en emitir su anime por televisión fuera de Japón.

Generaciones de españoles crecimos viendo la serie de dibujos de Bola de Dragón, que estuvo en emisión repetidamente unos 30 años. La primera generación fuimos de los 90, y a pesar de la leyenda urbana de que fue Canal Sur la primera en emitir la serie, fue el 8 de febrero de 1990 en los canales autonómicos de Galicia, Euskadi y Cataluña con su correspondiente doblaje. Ésta última, al ser la Comunidad Autónoma más grande de las tres pioneras, llevó la voz cantante en un éxito que era imposible de prever. Hubo niños que aprendieron catalán en Murcia siguiendo esta serie. A TeleMadrid llegó a finales de 1991 y una década después se emitió de forma nacional en Antena 3 durante el año 1997.

¿Pero por qué el éxito de Dragon Ball?

Ni su propio creador sabe dar la respuesta. Akira Toriyama, antes de dedicarse a ser creador de manga en exclusiva, trabajó como diseñador en un par de agencias de publicidad, trabajos que acabó abandonando por su poca predisposición a “madrugar” así como a vestir formalmente con trajes de corbata. Empeñado de que podían trasmitirse grandes historias a través del manga fue publicando en la popular revista Shonen Jump diferentes historias hasta llegar a su mayor éxito: Dragon Ball.

Akira Toriyama y su personaje mundialmente conocido, Goku

La obra de Akira se basa en Viaje al Oeste, el equivalente a El Quijote en la literatura china, uno de los clásicos de la dinastía Ming, en la que un monje budista viaja a India en busca de unos antiguos pergaminos religiosos y tiene como acompañante a Sun Wu-Kung, el Rey Mono, que vuela en una nube y tiene un bastón que se alarga.

De ahí salen las aventuras de Son Goku, un niño con cola de mono, que acompaña a Bulma, una inventora, en busca de las siete Bolas del Dragón, que, al combinarse convocan a Shenron, un dragón serpiente de tipo oriental que tiene el poder de conceder cualquier deseo.

Arale, de Dr Slump

Tras una primera etapa de aventuras divertidas y con grandes dosis de humor el tono muta hacia una historia de artes marciales para finalmente, en un giro muy loco pero que está perfectamente integrado, convertirse en una space opera de tintes mesiánicos que acaba con un combate por la libertad del universo con un tirano intergaláctico llamado Freezer. Luego la serie pierde un poco el norte, pero sigue siendo terriblemente disfrutable.

Quizá una de las claves principales del éxito de la serie es la cantidad de distintos personajes más allá del protagonista Goku, con su peso propio e historia particular. Krilin, Bulma, Yamcha, Célula, Vegeta, Freezer, Piccolo y muchos más. Si por el tiempo que ha pasado es difícil identificar al personaje por su nombre solo basta con crear una entrada por internet y ver su imagen para que se te dibuje una sonrisa en la boca al recordarlo. Y aunque como la gran mayoría de grandes historias es la lucha del bien contra el mal, se caracteriza a su vez por cierta complejidad en algunos personajes que pasan de malos a ser aliados y amigos de Goku. Todo aderezado de un humor surrealista japonés que descoloca a la vez que engancha.

Cómo la cultura pop japonesa conquistó Occidente

Toriyama, que falleció el día 1 de marzo con 68 años, nos ha dejado huérfanos a varias generaciones. Si bien había conseguido un notable éxito con Dr. Slump, una obra de humor absurdo serializada entre 1980 y 1984, nada fue comparable a Dragon Ball, lo que le obligó a alargar la serie manga más allá de sus deseos, hasta 519 capítulos durante 11 años. Esta obra ha marcado los códigos para el resto de mangas shonen («cómic japoneses orientados para jóvenes») durante las siguientes tres décadas. Siendo inspirador, como así lo reconocen, para dos de los grandes autores actuales de manga Eiichiro Oda (One Piece) y Masashi Kishimoto (Naruto) los cuales le han dedicado una carta pública al conocer su fallecimiento.

El gobierno japonés ha tenido unas declaraciones para él, agradeciendo cómo sus obras han hecho que los contenidos del país Nipón hayan sido reconocidos a nivel mundial. Incluso el Gobierno de China, México, Francia o El Salvador expresaron homenajes públicos.

La fortaleza de Dragon Ball ha sido conseguir llegar a un amplio público, muchísimo más allá de los aficionados otakus*. En los 90, los niños nos juntábamos en el colegio para comentar los hitos de la serie, jugábamos a hacer “Onda Vital” o “Hamehameha”, se popularizaron las fotocopias de sus dibujos, los álbunes de cromos… Así hasta tres décadas con las secuelas, repeticiones o películas.

Y esa influencia ha sido a nivel mundial, por supuesto Europa y EEUU, pero también en todo el continente latino. Influencia que se ha dejado ver en escenas cinematográficas de combate como Matrix o Superman Man of Steel, referencias y parodias en series como Los Simpson. Influencia en el deporte, especialmente en el fútbol. En el mundo de los videojuegos, tatuajes etc.

Quizá Akira nos haya abandonado, pero seguirá siendo eterno gracias a haber emocionado a tantas y tantas generaciones.

One thought on “Sayonara, Toriyama-san”

  • RIP Akira. No hace mucho me descargué un pdf suyo para aprender a hacer cómics https://www.academia.edu/5173067/Akira_Toriyama_Taller_de_Manga Era el más grande. Los cómics los dejé, total,no iba a hacer webcómics para vender,no valgo para vender nada,nunca seré pequeño-burgués😭, pero sigo con el pdf

    Al que nooo le guste el vino, perdón,dragon ball,es un animal

    Empezó como un cuentecito cachondo, basado en una vieja historia china,con Son Goku niño,con un palo y buscando las bolas mágicas a transformarse en una serie de Bruce Lee,ya adulto y con un hijo,de salvador del universo

    A ver si reponen la serie

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