SELECCIÓN DE PRENSA NACIONAL

Rescate frente a crecimiento

EL Gobierno se juega esta semana la credibilidad internacional de España con la presentación de los presupuestos generales del Estado para el 2013 y con el detalle del nuevo programa de reformas que el ministro de Economía, Luis de Guindos, prometió a sus colegas en la última reunión del Eurogrupo. La estrategia de Mariano Rajoy pretende impulsar y ejecutar la mayoría de las recomendaciones económicas que le han hecho llegar la Unión Europea y el Banco Central Europeo con el objetivo de ganarse su confianza y la de los mercados financieros para evitar tener que pedir un rescate.El ministro de Finanzas alemán, Wolfgang Schäuble, apoya la estrategia del Gobierno español y lo ha dicho muy claro hace escasos días: España no necesita un nuevo «programa de ayuda» europeo -después del rescate bancario por valor de 100.000 millones de euros ya solicitado- porque se halla en una senda de reformas que serán exitosas. Lo que España necesita -ha dicho- es la confianza de los mercados financieros.La gran duda que se plantea es si la política de ajuste puro y duro en la que se encuentra España, que seguramente se intensificará a partir de esta semana -y que un nuevo rescate acrecentaría todavía más-, es la receta que se necesita para ganarse la confianza de los mercados a la que se refiere Schäuble.A corto plazo, muy probablemente, un endurecimiento del ajuste fiscal puede lograr este objetivo. Pero a medio plazo está comprobado que, haya o no rescate, el ajuste por el ajuste deprime más la economía, incrementa el desempleo, provoca una caída de la recaudación y dificulta todavía más la pretendida reducción del déficit público, con insoportables sacrificios para la población y con nuevas oleadas de desconfianza de los mercados financieros. Los ejemplos de Grecia y Portugal son determinantes para comprobar que esa política, impulsada por Alemania, ha fracasado. De ahí la determinación de Mariano Rajoy y de su colega italiano, Mario Monti, de intentar negociar una salida más suave para la difícil situación en que se encuentran ambas economías. De momento, los mercados financieros les están dando una tregua.El rescate que España necesita para ganarse la definitiva confianza de los mercados financieros no es el que ofrecen las autoridades europeas, aunque al final no haya otro remedio que acogerse a él. Debería ir más lejos

Deja una respuesta