Los sindicatos aceptan congelar de hecho el sueldo de los funcionarios

Sufrirán los de abajo

Los sindicatos mayoritarios de la función pública, CCOO, UGT y CSIF, han aceptado la propuesta del gobierno de que el sueldo de los funcionarios sólo aumente el próximo año un 0,3%, una congelación de hecho; con una cláusula de revisión para recuperar el poder adquisitivo que se perderá los próximos dos años, a partir de 2012.

¿Quién no daría saltos de alegría si nos dijeran que van no ya a congelar sino a bajar el sueldo de los altos cargos olíticos que también cobran del Estado? Como por ejemplo de los secretarios del Congreso que se llevan 5.899 euros cada mes (más de 11 millones de las antiguas pesetas al año). Incluso ¿quién no está de acuerdo con que le congelen el sueldo a los funcionarios de la primera escala (Grupo A de técnicos superiores) que cobran unos 2.500 euros netos cada mes? ¿Pero que puede pensar un funcionario de las escalas más bajas (Grupos C y D) de administrativos y auxiliar de administrativos que cobran entre 900 y 1,100 euros? Son varios cientos de miles los funcionarios y trabajadores contratados por las Administraciones públicas “mileuristas” o que ni siquiera llegan a serlo. A final de 2007 más de 400.000 funcionarios de la administración central estaban en ese nivel.¿Cómo se puede hacer tabla rasa de esta situación, y aceptar como hacen los sindicatos, una “congelación” general de los salarios de los funcionarios, sin tener en cuenta los niveles salariales?Con sueldos “mileuristas” y enfrentados a nuevas subidas de impuestos, cientos de miles de trabajadores de la función pública, de las escalas C y D, son parte de las clases populares sobre las que recae el peso de la crisis. En este caso no es el paro, pero sí la pérdida de poder adquisitivo de sus raquíticos salarios.A medida que se ha ido profundizando la crisis y vemos como actúan el gobierno y los sindicatos, se hace más evidente la necesidad de poner en marcha medidas para una redistribución efectiva de la riqueza. Y entre ellas, como proponíamos en el programa electoral “De verdad contra la crisis” una redistribución de la masa salarial: Una escala salarial del 1 al 10 para hacer que nadie esté por debajo de los 1.000 euros mensuales, pero nadie por encima de los 10.000.Y para empezar, sólo rebajar y congelar por arriba y subir varios puntos por abajo debe ser la única política sindical aceptable.

Deja una respuesta