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Las grandes empresas del IBEX-35 han ganado en los nueve primeros meses del año casi 30.000 millones de euros, un 26% más que en el mismo periodo de 2014, según los resultados presentados por las compañías ante la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Según los datos estimados por los analistas, en los tres meses finales de 2015 este grupo de grandes empresas ganará otros 10.000 millones de euros. Es decir, cuando acabe el año los principales bancos y monopolios del selectivo IBEX-35 habrán ganado unos 40.000 millones de euros, 7.000 millones más que en 2014. Aumentan sus multimillonarios beneficios por tercer año consecutivo, mientras la gran mayoría de la población continúa en la precariedad y los recortes.
Sí hay dinero es lo primero que ponen de manifiesto estos resultados. En España se produce mucha riqueza cada año pero se concentra en muy pocas manos, en un puñado de banqueros y monopolistas. «La acumulación de beneficios del IBEX-35 encierra un triple trasvase de riqueza, desde el 90% de la población hacia la oligarquía financiera española y el gran capital extranjero»
Bancos y monopolios de energía en cabeza
Entre los doce primeros hay cuatro bancos. El Santander, que encabeza el ranking de mayores beneficios con 5.106 millones de beneficios y superará los 7.100 a final de año, el BBVA que puede llegar a casi 3.000 millones, CaixaBank (La Caixa) que superará los 1.275 millones (un 102% más que en 2014) y Bankia que ya ha ganado 855 millones de euros.
Hay dos eléctricas, rescatadas con 25.000 millones de dinero público por el famoso “déficit de tarifa”, Iberdrola y Endesa que habrán ganado a fin de año más de 3.600 millones de euros. Y otros dos monopolios energéticos, Gas Natural (1.090 millones en los nueve meses) y Repsol (832 millones).
Y completan la docena Telefónica (4.577 millones), Inditex (2020 millones), Abertis (1.797 millones) e IAG -exIberia, ahora en integrada en la British Airways- (1.180 millones).
Bancos y monopolios acumulan sus enormes ganancias gracias al dinero público inyectado en los rescates bancarios; al despido barato cuando no gratuito, la rebaja salarial y los contratos basura de la reforma laboral, y a las tarifas monopolistas impuestas, como esa subida del 83% de la luz en los últimos 12 años. Es decir gracias al saqueo sistemático de los salarios y rentas del 90% de la población y de los recursos del país.
¿Quién se lo lleva?
Estamos ante una gigantesca acumulación de beneficios que encierra un triple trasvase de riqueza, desde el 90% de la población hacia la oligarquía financiera española y el gran capital extranjero.
Según datos oficiales del Banco de España y el Instituto Nacional de Estadística, a finales de 2014 el 41,5% de las acciones del IBEX-35 estaban en manos del capital extranjero. La realidad es que ahora el capital extranjero controlaría en torno al 50%, o más, ya que la presencia del capital extranjero no ha cesado de aumentar y aumenta cada vez más su dominio sobre las “joyas de la corona” de la economía española.
El Santander reconoce que un 45,3% de sus acciones están en manos de capital extranjero, mientras en el BBVA llega al 52,3%. Pero según informes de la agencia norteamericana Bloomberg, las acciones de capital netamente español en estos bancos no superarían hoy el 5,1% en el Santander y el 15% en el BBVA. Lo mismo ocurre con el resto de grandes monopolios españoles, excepto Inditex, con Telefónica, Iberdrola, Repsol o Endesa.
Ahora mismo la mitad de los beneficios del IBEX-35 -unos 20.000 millones de euros- se iría fuera del país, y la otra mitad a los bolsillos de las familias de la oligarquía española. El ejemplo de Endesa habla por sí sólo. La empresa ha anunciado que desde 2015, hasta 2019 repartirá el 100% de su beneficio neto en efectivo a sus accionistas, una media durante estos 5 años de 1.200 millones anuales. El principal beneficiario será la italiana ENEL que controla el 70% de las acciones y que se llevará más de 800 millones de euros anuales. El capital extranjero se lleva la parte del león.
Si ganan más que paguen más
Bancos, monopolios y multinacionales pagan actualmente entre un 3,5 y un 6% de impuestos sobre sus enormes beneficios, a pesar de que la ley les obliga teóricamente a pagar el 28%. Frente al 16,6% de media que pagaron las pequeñas y medianas empresas.
Recortes para la inmensa mayoría, mayor carga tributaria para autónomos y pymes, precios de monopolio en los servicios básicos… y un endeudamiento galopante del país, mientras banqueros y monopolistas de aquí y de fuera acumulan beneficios y riqueza. ¿Por qué hemos de consentir esta situación de saqueo a la población y expolio del país? ¿Por qué los fondos norteamericanos o los bancos alemanes se han de llevar 20.000 millones de euros, sólo del IBEX 35 pagando diez veces menos impuestos que una pyme?
Los que más ganan que paguen más. Urge una Reforma Fiscal Progresiva como la que propone Recortes Cero dentro de su programa de redistribución de la riqueza.
Una reforma que eleve el Impuesto de Sociedades a bancos, monopolios y multinacionales al 50%, eliminando las bonificaciones, desgravaciones y exenciones que le permiten sortear sus obligaciones fiscales.
Con el actual sistema de privilegios pagarán como mucho 2.600 millones por sus 40.000 millones de beneficios. Con la reforma progresiva deberían pagan 20.000.
Recursos que se inyectarían en la economía nacional para reactivar la producción, luchar contra los recortes, el paro o el empobrecimiento.