Cargando...Hay que decir sobre la política africana de Francia que tras la fachada de las independencias, París continuó a base de golpes de Estado, apoyando regímenes dictatoriales y controlando totalmente los resortes económicos y al personal dirigente que hace la ley en sus antiguas colonias
El eriódico de investigación independiente ”Red Voltaire” ha sido cerrado por un artículo que vincula al presidente francés Nicolás Sarkozy con la situación de guerra y genocidio en la zona de los Grandes Lagos.Nicolas Sarkozy ha pronunciado exactamente estas palabras «En cuanto a la región de los Grandes Lagos, la violencia se ha desencadenado una vez más. La opción militar no aportará ninguna solución a los problemas de fondo que se plantean de forma recurrente desde hace diez años. Esa situación pone sobre la mesa la cuestión del futuro de Ruanda, con quien Francia ha recuperado el diálogo, un país con una demografía dinámica y poca superficie. La situación también plantea la cuestión de la República Democrática del Congo, un país con una superficie inmensa, y cuyas riquezas fronterizas están gestionadas por extranjeros. Está claro que en un momento u otro tiene que haber un diálogo que no sea simplemente un diálogo coyuntural, sino un diálogo estructural ¿Cómo, en esta región del mundo?: Repartiendo el espacio, repartiendo las riquezas y asumiendo que la geografía tiene sus leyes, que los países a veces cambian de dirección y que hay que aprender a vivir unos junto a otros». “Un país con una demografía dinámica y poca superficie” Por ese motivo la implicación de Francia en el genocidio de Ruanda, cuando se produjo la matanza de 800.000 hutus y tutsis, ya no se cuestiona sino que se afirma. “Cuyas riquezas fronterizas están gestionadas por extranjeros” . En este caso debería explicar el papel dela empresa Elf que es la número uno de Francia, que esta oficialmente asentado en más de 100 países, y ciertos grandes grupos financieros, con los que les une fuertes lazos, y que están vinculados en el saqueo de los recursos del continente Africano. Se trata de un complot internacional para balcanizar el país. Una practica que no es desconocida para la civilizada Francia, la potencia que ha sembrado Africa de enfrentamientos tribales y odios étnicos como mejor medio para asegurarse el control de los débiles Estados africanos y el expolio despiadado de sus enormes recursos naturales. Y al lado de Francia, EEUU. Unas veces coludiendo -en la Guerra Fría, contra la infiltración de la URSS en el continente- otras enfrentándose a través de sanguianrios señores de la guerra. Pero al imperialismo francés y norteamericano le ha salido un peligroso competidor en el continente negro: China. La política internacional de este país y sobre todo en África hace ver la posibilidad de la perdida de control de Francia y EEUU de la ingente fuente de materias primas que es Africa Central. Las relaciones comerciales que establece China, mucho más ventajosas para las repúblicas africanas frente al expolio descarado al que le someten las potencias occidentales están haciendo que muchos Estados giren su mirada a Pekin. Y antes que permitir esto, el imperialismo francés -de la mano de Sarkozy- está dispuesto a romper Africa en mil pedazos, aunque sea a costa de cientos de genocidios. Al fin y al cabo ¿cuanto vale para ellos la vida de los negros comparado con las riquezas de las minas del Rey Salomón?