Los fichajes por el «nuevo» Real Madrid de Florentino, Kaká y Cristiano Ronaldo, por 65 millones de euros y 94 millones respectivamente, han desatado todo tipo de denuncias. Sobre todo cuando se ha sabido que estos fichajes tributarán a la Hacienda Pública con una tasa especial reducida del 24% (nivel al que lo bajó Zapatero) frente a la tasa normal del 43% que cotizan, por ejemplo, los jugadores españoles.
Así resulta que las “estrellas” extranjeras del fútbol nacional, con sueldos multimillonarios, tributan con el mismo orcentaje que uno que gane 55.000 euros. Pero como ocurre en tantas cosas ¿por qué se pone el foco del escándalo sobre estos privilegios sin ponerlo en los sueldos mil millonarios de los banqueos, los altos ejecutivos y los beneficios de los grupos monopolistas?El banquero amigo de Zapatero, Emilio Botín, gana 4 millones de euros al mes, más de 1,6 millones de euros. El presidente del BBVA, Francisco González, más de 1,64 millones de euros mensuales. Más de 130 millones de euros en “bonus” se repartió el consejo de administración del BBVA… Por no hablar de los miles de millones de euros que acumulan en beneficios (casi 30.000 millones de euros de beneficios ganó la banca en 2008) y por los que tributan por debajo de lo que lo hacen, por ejemplo, las pymes. Los grandes medios de comunicación siguen marcando la pauta de con quien se pueden meter y con quien no. Se pueden meter con “las estrellas” del deporte, con casos concretos de corrupción –sobre todo si son arma arrojadiza de un partido contra otro-, pero no con los auténticos desfalcadores vinculados, sobre todo, a los centros del poder económico. Se pueden criticar los 94 millones de euros de Cristinano Ronaldo, ¿pero qué son al lado del agujero negro de 9.000 millones de la Caja de Castilla-La Mancha? ¿O de los 90.000 millones que van a poner en el segundo plan de rescate bancario?Es injusto y un agravio comparativo que los llamados “impatriados”, ganando muchas veces más tributen un 50% menos. Pero la fiscalidad de los deportistas extranjeros es el “chocolate del loro” comparado con el desfalco a la hacienda pública que hace el sistema de impuestos, permitiendo que las grandes fortunas y empresas evadan impuestos de manera sistemática sin que los diferentes gobiernos hagan nada para corregirlo.No nos engañemos, sólo subiendo un 50% los impuestos sobre los beneficios de la banca (27.828 millones de euros en 2008, el Estado dispondría de 13.000 millones de euros más para tomar medidas contra la crisis. No tocar los sueldos de los altos ejecutivos de la banca y monopolios, no implantar un nuevo sistema general de fiscalidad que grave proporcionalmente sobre beneficios… Eso es en lo que no entran quienes se limitan a denunciar el escándalo de los deportistas de élite pero no ven la viga en lo que ya está pasando con la banca y las multinacionales.