En la U.E., la oleada los recortes ha provocado un incremento de las cifras de pobreza. Al mismo tiempo, según el último informe publicado por el Banco Mundial a comienzos de mes, la pobreza extrema mundial en su conjunto ha disminuido gracias a las políticas de crecimiento económico y redistribución de la riqueza de los países emergentes y en vías de desarrollo.
En 1981, el número de personas que vivían en la pobreza extrema (menos de 1,25 dólares al día) era de 1.940 millones de personas. En 2008, y a pesar de que la población mundial ha crecido en un 20%, la cantidad de personas en situación de pobreza extrema se había reducido a 1.290 millones. Pero incluso después de 2008, y a pesar de la crisis que afecta a los países desarrollados capitaneados por EEUU, la pobreza extrema ha seguido reduciéndose de forma acelerada, de forma que hoy no llegan a los 1.000 millones de personas. «La mayor aportación a la reducción de la pobreza viene de China, que en apenas 3 décadas ha sacado de la pobreza a 500 millones de sus ciudadanos»
La mayor aportación a la reducción de la pobreza viene de China, que en apenas 3 décadas ha sacado de la pobreza a 500 millones de sus ciudadanos Pero no sólo de ella. También Iberoamérica, desde la llegada al poder de gobiernos antihegemonistas ha conseguido resultados espectaculares, reduciendo de 14 al 6,5% el número de personas en esta situación.
Mientras el Primer y el Segundo Mundo ven aumentar el número de ciudadanos que viven bajo el umbral de la pobreza, quienes siguen una línea independiente y autónoma conocen el efecto exactamente contrario.