M. A. Martí­nez Valledor (Comité Intercentros Hullera Vasco Leonesa)

«Nos van a meter en la miseria pura y dura»

Entrevistamos a Marco Antonio Martí­nez Valledor, presidente del Comité Intercentros de la empresa Hullera Vasco Leonesa y afiliado de Unión Sindical Obrera (USO). También participa en la entrevista Ángel Suárez Iglesias, secretario de acción sindical de USO en Asturias. Hullera Vasco Leonesa es la empresa en cuyo «Pozo Emilio del Valle» fallecieron 6 mineros el pasado 28 de octubre. Han pasado dí­as, un par de semanas, pero, aunque parezca lo contrario, nada de lo sucedido está olvidado, y nada debe olvidarse. Sus muertes están vivas.  

Lo primero es transmitirte nuestras condolencias para las familias de los fallecidos, para los que han sobrevivido y para todos los compañeros. ¿Qué ha pasado para que haya ocurrido esta tragedia?Ha sucedido una desgracia no deseada por los trabajadores. ¿Las causas exactas? Hay un proceso de investigación, donde hemos solicitado nuestra presencia, y las causas hay que esclarecerlas con una total transparencia, para dar una explicación primero a las familias de los fallecidos, que ya bastante están sufriendo, y después a todos los compañeros, para que esto no vuelva a suceder.¿Ha estado o está la empresa en un proceso de un ERE?La empresa ha estado con un proceso de un ERE desde principios de año, a partir de febrero, por la demora y la no activación del real decreto y la decisión de las grandes empresas eléctricas de no realizar compras de carbón.¿Por qué se ha dado esa negativa a comprar de las grandes empresas eléctricas?«La empresa está utilizando subcontratas que pagan la mitad del salario por el mismo trabajo» Después de tantos años, ahora se está tratando de que en España haya un plan energético nacional. Supone una reforma energética. Se fija que un porcentaje de la generación energética en este país tiene que ser termoeléctrica, tener algo que lo sustente y lo garantice. Y esto sólo puede hacerse con el carbón nacional, nada más puede serlo. Esta reforma propuesta supondría quitar algunos privilegios a las grandes empresas eléctricas por lo que inmediatamente han atacado mediante la suspensión de las compras de carbón nacional.¿Se ha producido algo durante el ERE que afecte a la organización de la seguridad en las minas?Simultáneamente al proceso del ERE aparece un problema en otro pozo, en el llamado «flanco sur» de la empresa. Ante ello dos ingenieros, el director de seguridad y el jefe de la brigada de salvamento, por tanto personas responsables de la seguridad y del salvamento en la empresa, avisaron a la dirección para que durante el ERE se siguiera extrayendo carbón para evitar un fuego porque se estaba atravesando por una zona peligrosamente «ideal» para la concentración de fuegos. El aviso no sólo se rechazó sino que, con alevosía y premeditación, se ensombreció, y con picaresca desviaron el problema trasladándolo al seno de la misma brigada de salvamento y con ello conseguir despedirlos, además de degradar a un vigilante de dicha brigada. Lo más grave de todo esto es el efecto que lleva, un escarmiento, «si despedimos a dos ingenieros qué no haremos con dos mineros». ¿Cobran los mineros en la empresa lo mismo por el mismo trabajo?No. Hay picadores que están cobrando la mitad de lo que ganan otros. La empresa está utilizando subcontratas que pagan la mitad del salario por el mismo trabajo.¿Qué opinas de los oscuros negocios del carbón de importación, como en 2012 cuando el fondo de inversiones de EEUU Goldman Sachs mantuvo 156.300 toneladas de carbón térmico colombiano en el puerto del Musel, en Gijón? [Interviene Ángel Suárez] De hecho, en Aboño, hay un parque de Carbones Aboño para el almacenamiento de carbón coquizable preparado precisamente para eso, pero además más cerca del mar existen instalaciones donde se almacenan grandes cantidades de carbón de importación, 100.000, 200.000 toneladas, que se usan en contra del carbón nacional.«Las medidas para evitar accidentes nunca pueden ser de incremento de las jornadas laborales en el interior de la mina» [Sigue Marco Antonio Martínez Valledor] Vamos a hablar claro y después se saca la conclusión. Por un lado, necesitamos quemar también, por razones ecológicas, carbón de importación, dado que la mayoría de ese carbón tiene poco contenido de azufre. El carbón nacional tiene, en su mayoría, gran concentración de azufre como el del Bierzo y el de Teruel (6%); pero no todos, algunos no la tienen, como el de Hullas del Coto Cortés, Coto Minero Cantábrico, y así, mediante la mezcla de calidades del nacional y del internacional, se puede bajar la tempera para obtener las calidades adecuadas. Otra cosa muy distinta, es tener gigantescos depósitos para hacer fluctuar el precio del carbón y obtener así ganancias extraordinarias.Se juega con el precio de todas las materias primas incluido el carbón. Se habla de la existencia de un cargo político del Ministerio de Economía vinculado al transporte marítimo de grandes cantidades de carbón. Si esto es cierto, quien tenga los datos debería denunciarlo.¿Consideras que el carbón como materia prima autóctona hay que mantenerlo en España?Claro que sí. Por pura economía y no sólo la economía de las zonas mineras, que también, sino por el conjunto de la economía española. Esa es la historia de España. Es la mayor reserva energética autóctona que tiene este país. Otra cosa es a qué precio se extraiga. Que sea lo más barata y limpia posible.Todo el proceso de ir cerrando las minas en España se ha justificado como directriz de la Unión Europea, sin embargo se están abriendo minas en Alemania.Primero, aclarar que en España se ha pasado del reglamento 2002-2010 que señalaba la necesidad de tener una reserva autóctona estratégica, a tomar la decisión de que esa reserva tiene que desaparecer. Eso no es normal, es incoherente.Segundo, el proceso de cierre es igual en todos los países europeos para las minas que reciben ayudas públicas. Claro que en Alemania se están abriendo minas, pero minas sin ayudas públicas como están recibiendo las de Sarre. Abriendo minas sin ayudas a cambio claro de la miseria de los mineros que trabajan en ellas.Lo lógico es que las minas en España, dado su carácter estratégico, fueran empresas públicas como deberían serlo las eléctricas. No se pueden dar ayudas públicas a empresas privadas para que obtengan beneficios, y que además sean empresas con dominio casi total del sector. Para eso que sean públicas. No se entiende que Endesa se privatizara para que la comprara una empresa pública italiana, y no se entiende que Hidroeléctrica se privatizara para que la comprara una empresa pública portuguesa. Algo se está haciendo mal. La energía autóctona es fundamental para un país. Nos van a meter en la miseria pura y dura.¿A qué crees que se debe esta política energética?Los políticos hasta ahora en España no tienen claro lo que interesa a España, tendrán claro lo que les interesa a algunos que tienen mucho dinero.¿Quieres añadir algo más?Tres cosas. La primera, insistir en que hay que investigar las causas de la desgracia sucedida en mi empresa, no deseada por los trabajadores. Especialmente por las familias de los fallecidos y de paso por los trabajadores para que no vuelva a suceder.La segunda, volver a destacar que sólo el carbón, no las energías renovables, que están muy bien, es capaz de mantener en todo momento la red energética en España.Y la tercera, que se me ha pasado mencionar antes pero que es importante. Las medidas para evitar posibles accidentes como el sucedido nunca pueden ser medidas de incremento de las jornadas laborales en el interior de la mina, ni deben firmarlo nunca representantes sindicales. Tienen que ser el cumplimiento estricto de las normas con un mayor control de las administraciones ejercido directamente por la propia administración, y no por empresas privadas subvencionadas por los fondos mineros sin el control adecuado. Si hace falta se extrae de otras partidas de dichos fondosPara terminar quiero dejar claro que en la minería hay personas, no hay números. Los mineros somos personas, no somos números. En este momento, las familias de los fallecidos, después, todos los demás.

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