Pagaremos por las ambulancias o las prótesis

No es sólo el copago hay más

Nos han explicado el «copago farmacéutico» por arriba y por abajo. Lo que no nos han dicho es que detrás del copago vení­an más cosas y ninguna de ellas es buena. No sólo pagaremos más por los medicamentos, incluyendo a los pensionistas. Es que también han aprobado, a la «chita callando», el copago asistencial. Y se atreven a excluir a sectores enteros de la sanidad pública. Han empezado por los inmigrantes ilegales. ¿Cuál será el próximo?

Gracias a la publicación de un Decreto-Ley de medidas urgentes, nos hemos enterado que prestaciones como el “transporte sanitario no urgente” –las ambulancias-, las prótesis o los productos dietéticos han pasado a ser considerados como “servicios accesorios”, y por tanto sujetos dejan de ser gratuitos.» Pensábamos que la imagen de la sanidad norteamericana, donde quien no paga no es atendido, jamás llegaría a España. Nos equivocábamos. Han empezado por los inmigrantes ilegales, ¿por donde seguirán?»

Si se te ocurre llamar a una ambulancia, y el caso no es considerado “grave”, te tocará pagar. Si pierdes una pierna y necesitas una prótesis, te tocará pagar. Si tu hijo tiene problemas alimenticios, te tocará pagar.

Y esto es solo el principio. Han aprobado un catálogo de “servicios básicos” que la sanidad pública debe cubrir obligatoriamente en toda España. Aparentemente, es para “garantizar que todos los ciudadanos tienen acceso al mismo nivel de prestaciones”.

Pero esconde un truco. Todo lo que no está calificado como “servicio básico” pasa a ser un “servicio accesorio”, y por tanto se podrá cobrar.

Han empezado por las ambulancias, las prótesis o los productos dietéticos… ¿qué será lo siguiente que nos harán pagar? En Italia, hacerse un análisis de sangre cuesta 55 euros.

Y todavía hay más. Pensábamos que la imagen de la sanidad norteamericana, donde quien no paga no es atendido, jamás llegaría a España. Nos equivocábamos.

Los inmigrantes ilegales van a dejar de estar cubiertos por la sanidad pública. Solo podrán acudir a urgencias. Solo las embarazadas y los menores tendrán acceso a la sanidad pública.

Si un trabajador inmigrante en situación de ilegalidad enferma, no se le atenderá… como pasa en EEUU.Se han cargado el carácter universal de la sanidad. De un plumazo. Se puede dejar a alguien sin cobertura sanitaria. Es el mayor ataque conocido a la sanidad pública.

No lo podemos permitir. Ahora apuntan hacia los inmigrantes ilegales, el sector más desprotegido, alegando que “no pagan impuestos y no contribuyen al mantenimiento de la sanidad”. Si les dejamos que se salgan con la suya, mañana pueden decir que los parados de larga duración “tampoco contribuyen al mantenimiento de la sanidad” y pueden ser excluidos.

¿Qué eso es imposible? ¿Pensaba usted que alguna vez tendría que pagar las ambulancias de la sanidad pública? Pues ya está pasando.

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