Movimiento obrero

Los obreros del metal de Vigo

Los trabajadores del metal siguen dando la batalla. La exigencia de una mesa de negociación de un nuevo convenio colectivo es firme y contundente. Ya lo anunciaron, están reparados para una lucha a largo plazo que solucione las condiciones precarias que tienen con el antiguo convenio. A pesar de que la patronal afirma que no tiene ningún problema con firmar un convenio a un año vista, los obreros insisten en sentarse a negociar las condiciones, mientras la patronal se sale por la tangente sin hacer ninguna propuesta concreta. El grito de Lume!! Lume!! Ya es la voz que llama a la batalla a estos obreros. Hoy la batalla ha sido literal de nuevo. Hay que denunciar las actuaciones violentas de petardos y quema de contenedores que estos obreros han realizado en su protesta, ya que acciones puntuales como esta son usadas para desarmar a la clase obrera de su arma más potente, la organización y la unidad. Por eso esta batalla debe ser en una misma dirección para golpear fuerte como un puño. Por otra parte, la policía iba preparada con pelotas de goma y bombas de humo, que no dudó en cargar con los manifestantes, que han cortado el tráfico y se han atrincherado en barricadas. El resultado es de varios heridos, entre policías y huelguistas, pero también ha resultado herido un cámara de televisión que permanece hospitalizado con quemaduras en una pierna producidas por un petardo. La situación es crítica para los obreros que no tienen nada que perder y sí mucho que ganar. Y aislar las prácticas violentas debe ser una prioridad, de forma que se puedan defender, pero en ningún caso deben cargar ellos mismos, ya que es una práctica que para nada beneficia este movimiento de lucha obrera con justeza y filo. Es el coraje y la posición de la clase obrera, que en esta crisis no se deja amedrentar, que se sigue atrincherando en barricadas y peleando por su pan. Ya llevan varias jornadas de huelga, y anuncian que la próxima semana seguirán, de forma que obliguen a la patronal a sentarse a negociar las condiciones, es ese el terreno, es esa la posición firme. La de dirigir el proceso, la de decidir sobre sus intereses, no de aceptar negociaciones precarias que con la crisis son muy comunes para acallar el movimiento de lucha de muchos trabajadores que se organizan para defender sus derechos, el convenio colectivo se creó como herramienta negociadora que dotara a la clase obrera de un medio por el cual poder avanzar en sus derechos en la social democracia. Sin embargo, se usan para conducir diferentes movimientos de lucha para encauzarlas en la dirección que interesa al Estado, por eso, mantener firme la línea de lucha y firmeza, para que no nos vendan al mejor portor en contra de nuestros intereses.

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