La Agencia, dependiente de de la Vicepresidencia de la Generalitat que dirige Josep Lluís Carod-Rovira, al parecer está plagada de «irregularidades».
Según el informe de la Sindicatura de Cuentas, órgano encargado de fiscalizar la gestión de las administraciones úblicas catalanas, por ejemplo, la Agencia disponía de 29 tarjetas, dos de las cuales estaban a nombre de dos personas en excedencia, se cargaban comidas de “reuniones” por duplicado o se advierte del pago duplicado a la Seguridad Social de 51.185 euros. La sindicatura revela irregularidades en la concesión de subvenciones. Por ejemplo, en dos convocatorias, no hay correspondencia entre las puntuaciones de las juntas de valoración y las resoluciones de concesión. “Hay casos en que se conceden subvenciones con una puntuación muy baja y se deniegan otras que tienen una puntuación muy superior”, afirma el informe. El informe hace constar también los 272.600 euros que el departamento de Carod gastó en una fiesta para publicitar sus ayudas al tercer mundo. Si son tan “solidarios” ¿por qué no se empleo este dinero en ayudas? Derrochar, incluso en tiempos de crisis, eso es lo único que conoce Carod y la parasitaria burguesía burocrática catalana.