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La UE pide que las pensiones no se revaloricen con el IPC

La Comisión Europea y el Banco Central Europeo piden a España que acabe definitivamente con el sistema que vincula la subida de las pensiones a la inflación y también la tradición de revalorizar con ese parámetro los salarios públicos y privados, según confirmaron a este diario fuentes del Gobierno. «En Bruselas nos piden la desindexación y no es la primera vez», aseguraron. La posición de Bruselas es que ligar al IPC las subidas de sueldos o pensiones daña la competitividad del país y las arcas públicas y es una de las reformas pendientes que debe afrontar el Gobierno de inmediato.

La revalorización automática de las pensiones en función de la inflación fue de una de las decisiones más populares tomadas por el Ejecutivo de José María Aznar en 1998 tras amarrar el ingreso de España en el euro. Aquella medida, destinada a garantizar el poder adquisitivo de los pensionistas, debe tener ya los días contados, según los expertos de la UE.Sin embargo, Rajoy tiene intención de desoír esta petición, al menos este año, y actualizar las pensiones en función de los precios. El problema para las arcas públicas es que la inflación hasta agosto se disparó hasta el 2,7% en plena recesión y si mantiene su tendencia creciente implicará un desembolso multimillonario en el mes de noviembre, el de referencia para actualizar las pensiones si se han desviado sobre el IPC estimado inicialmente. Se prevé el 3% entonces, con un coste de 3.000 millones para mantener el poder adquisitivo de la pensiones, uno de los más elevados de la historia de la Ley General de la Seguridad Social.Las fuentes gubernamentales consultadas estiman que para afrontar tal gasto será necesario recurrir al Fondo de Reserva de la Seguridad Social, la llamada hucha de las pensiones, dada la precariedad presupuestaria para afrontar gastos imprevistos.Esos mismos medios señalan que, precisamente para atenuar el golpe, el ministro de Industria, José Manuel Soria, ha iniciado reuniones con las empresas petroleras con el fin de contener el coste de los carburantes, principales responsables de la actual espiral de precios en España.

Las pensiones tienen un alto valor simbólico para los socios europeos y los mercados, puesto que suele ser considerado un síntoma de la determinación de los gobiernos para cumplir sus compromisos. Fuentes próximas al anterior jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, aseguran que justamente por eso introdujo en el paquete de medidas de mayo de 2010 la impopular congelación de las pensiones.El Gobierno desmintió ayer que esté estudiando tal petición de la UE para 2013, aunque no con la rotundidad habitual. «Esa información ha sido desmentida tajantemente por el Ministerio de Economía, y a ese desmentido me remito», afirmó ayer escuetamente la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría. No es habitual que en un asunto de tal calado delegue el desmentido en un Ministerio que, además, no es el más indicado al respecto en comparación con el de Hacienda o del Empleo y Seguridad Social. La frase de Rajoy ayer en Roma -«yo creo que las pensiones las subiremos»- tampoco es la más rotunda que ha pronunciado.El Ejecutivo se maneja con prudencia porque está negociando al tiempo las condiciones de un eventual rescate a España que puede cambiar el actual mapa de decisiones. No obstante, Sáenz de Santamaría apuntó que la congelación de las pensiones sería «lo último» que haría el presidente del Gobierno.Según ha podido saber EL MUNDO, el vicesecretario general de la patronal CEOE, Alberto Nadal, mantuvo una reunión técnica interna hace unos días en la que apostó por dos condiciones principales para el rescate y las consideró inevitables: la desindexación definitiva de salarios de la inflación y un adelantamiento de la reforma de pensiones para obligar antes a los ciudadanos a jubilarse a los 67 años.

El Gobierno del PSOE aprobó que esa extensión de la vida laboral se produjera en 2027, pero es demasiado tarde para Bruselas. En cuanto a los salarios, la patronal admite que en los convenios que se están renovando no se aplica el acuerdo CEOE-sindicatos de moderación salarial previsto para este año y desligado del IPC.El directivo de CEOE dijo que, según la información de la que disponía, es lo que se exigía a España para que el BCE se lance a comprar deuda pública española. Nadal viajó a Bruselas el pasado martes y, además de respetado economista, es hermano del director de la Oficina Económica de Presidencia del Gobierno, Álvaro Nadal.El pasado miércoles, el presidente de la Comisión de Economía de CEOE, José Luis Feito, mencionó ante su Junta Directiva que la revalorización de las pensiones era precisamente uno de los factores que podían provocar un desvío y falta de credibilidad de España en el cumplimiento del objetivo de déficit. Señaló que si se revalorizan este año y también el próximo, el sobrecoste puede superar los 4.000 millones de euros.

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