Es el momento de desarrollar una linea sindical combativa. Frente a los recortes que nos quieren imponer desde el Gobierno y la banca nos caben dos caminos, la sumisión como en Irlanda o la movilización como en Grecia. De los trabajadores y su grado de organización depende.
í‰xito rutundoHemos tenido noticia, or la página de información de USO en internet, de la convocatoria y realización de una huelga general de 48 horas en el sector de los metalgrafiteros en nuestro país. Las industrias metalgrafiteras se han visto paralizadas en toda España los pasados días 17 y 18 de marzo. Este sector de la metalurgia, según declara el sindicato USO, es uno de los que menos se ha visto afectado por la crisis. Normalmente sus trabajadores cobran un salario inferior al resto de los metalúrgicos. Además este sub-sector no ha tenido ninguna mejora social desde 2005. Ahora, con el pretexto de la crisis, se pretende imponer un convenio de cuatro años de duración donde los trabajadores pierde poder adquisitivo. Este convenio lo está promoviendo la patronal de sector AME, pero, como denuncia USO, se ampara en la línea de moderación salarial firmada entre las cúpulas sindicales de CCOO y UGT y la plana mayor de la CEOE este febrero último. USO anuncia la intención firme de seguir con esta línea de movilizaciones en este sector de no cambiar la dinámica de la patronal. Por una respuesta popularEste es un ejemplo más de la respuesta de los trabajadores ante determinadas líneas pactistas de las Secretarías Generales de los sindicatos mayoritarios. Como ocurre en muchas empresas y sectores grandes y pequeños, como por ejemplo Ford, EULEN en Córdoba, o los metalgrafiteros mismos, otros sindicatos más pequeños pero más combativos se abren camino y las luchas con ellos. Las cúpulas sindicales pueden firmar con la Banca y su gobierno la redición ante los recortes draconianos que nos quieren imponer; pero ¿será aceptada por la clase obrera y el pueblo trabajador? Luchas como las de los metalgrafiteros nos muestran como una de las posibilidades, la Huelga General, se puede abrir camino.