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Nos repetían que el dinero público inyectado en Bankia se recuperaría con intereses. Han sido los banqueros quienes han aclarado la verdad. El dinero entregado a Bankia no es un «préstamo», es un atraco… y los ladrones jamás devuelven el dinero.
Como todo buen banquero, armado de una mente fría y racional, el nuevo presidente de Bankia no necesita hacer uso de las manipulaciones y el engaño del lenguaje político.
Mientras el ministro de Economía de Guindos –como antes hizo Elena Salgado– se desgañita diciendo a diestro y siniestro que “la reforma financiera no costará dinero a los contribuyentes” y que “las ayudas públicas se recuperarán con intereses”, el banquero nos recuerda la verdad del asunto: el dinero ya es suyo y jamás lo van a devolver.
Lo que en lenguaje popular se conocería como “Santa Rita, Rita, Rita….”, Goirigolzarri lo expresa con palabras tan técnicas como precisas y contundentes. Los 23.500 millones de dinero público que el gobierno va a inyectar en Bankia no son ningún préstamo que haya que devolver, sino una inyección forzosa de capital. Si la cosa en el futuro sale bien, el Estado podrá recuperar todo o parte de lo invertido vendiendo su participación accionarial. Si sale mal, o no del todo bien, entonces… adiós a los 23.500 millones y a otra cosa.
Después de todo no es dinero suyo el que está en juego. Él ya tiene a buen recaudo los más de 55 millones de euros que recibió del BBVA por su jubilación anticipada.