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El juez cita como imputados a Jordi Pujol padre y a Marta Ferrusola

El juez de la Audiencia Nacional José de la Mata ha citado a declarar como investigados (denominación que la nueva Ley de Enjuiciamiento Criminal da a los imputados) el próximo 10 de febrero al expresidente de la Generalitat de Cataluña Jordi Pujol Soley y a su esposa, Marta Ferrusola, por un delito de blanqueo continuado.

El juez de la Audiencia Nacional José de la Mata ha citado a declarar como investigados (denominación que la nueva Ley de Enjuiciamiento Criminal da a los imputados) el próximo 10 de febrero al expresidente de la Generalitat de Cataluña Jordi Pujol Soley y a su esposa, Marta Ferrusola, por un delito de blanqueo continuado. El magistrado los cita dentro de la causa por diferentes delitos de corrupción abierta contra el hijo mayor del matrimonio, Jordi Pujol Ferrusola. De la Mata, además, ha asumido la causa remitida por la titular del Juzgado de Instrucción 31 de Barcelona, Beatriz Balfagón, sobre los delitos fiscales de la familia destapados cuando el expresident declaró la tenencia de fondos ocultos en Andorra que atribuyó a una herencia de su padre, Florenci.

Hace casi un mes, la Fiscalía había instado al juez De la Mata a «tener por imputados» a Pujol y a su mujer por la titularidad de una cuenta en Andorra con 1,8 millones de euros. Pujol y su mujer «participan del delito de blanqueo de capitales» atribuido a sus hijos por la fortuna oculta en Andorra.

De la Mata ha dictado un total de 13 autos en la causa en la que investigaba a Jordi, Pere y José Pujol Ferrusola en los que, a lo largo de más de 200 páginas, acuerda una batería de diligencias y medidas con las que impulsar y avanzar en esta investigación y, entre ellas, la citación como investigados por un delito de blanqueo de capitales continuado de Jordi Pujol Soley y Marta Ferrusola Llados. Al día siguiente, 11 de febrero, acudirá a declarar, a petición propia, el primogénito del matrimonio, Jordi Pujol Ferrusola.

El magistrado relata que Jordi Pujol Ferrusola y su exesposa, Mercè Gironés Riera, son titulares en Andorra de una serie de cuentas corrientes cuya existencia negaron. La investigación ha puesto de manifiesto que «el resto de miembros de la familia» Pujol Ferrusolatambién han resultado ser titulares de cuentas bancarias en ese país. Según el auto, las cuentas de Jordi Pujol Ferrusola y su exmujer presentan abonos de origen desconocido «que no pueden asimilarse a una actividad legal» y abonos por transferencia o traspasos que en algunos casos han sido identificados con personas que desarrollan una labor empresarial entroncada con el sector público en Cataluña.

Parte de esos fondos, dice el juez, han sido distribuidos por el primogénito entre todos sus hermanos y su madre, en cantidades iguales o similares y generalmente en momentos coincidentes con ingresos de origen desconocido verificados en las cuentas corrientes de aquel en Andorra. «Estas operaciones revelan de nuevo la existencia de un patrón de comportamiento reiterado durante años por los miembros de la familia, que apuntan nuevos elementos básicos de una organización cuyos perfiles definitivos (…) están aún bajo investigación y pendiente de calificar».

El juez añade que se ha podido descubrir que después de que se produjera un ingreso sospechoso, Jordi Pujol Ferrusola ordenaba que se realizaran traspasos a sus cuentas de Andorra a sus hermanosOleguer, Oriol, Josep, Pere, Mireia y Marta Pujol Ferrusola, movimientos que beneficiaban también a la cuenta de su madre Marta Ferrusola Llados, «también beneficiaria de algunos de esos repartos».

De la Mata señala que los miembros de la familia Pujol Ferrusola han dispuesto de «importantes cantidades de dinero a través de cuentas bancarias abiertas en Andorra», en las que figuran como titulares cada uno de los hermanos y Marta Ferrusola, siendo Jordi Pujol Soley «beneficiario real último» de otra de las cuentas. Estos fondos se recibían en muchos casos en efectivo (dotándoles así de un primer nivel de opacidad) en cuentas abiertas en una jurisdicción extranjera, cuya existencia se ha negado reiteradamente y se ha tratado de mantener oculta.

Pujol Soley, explica el magistrado, «es titular real de los fondos existentes en la cuenta 63810 de la Banca Reig que fueron ingresados en efectivo y de los que dispuso hasta finales de 2010», con «idéntica intención de ocultación, utilizando a persona interpuesta y ocultando también su origen», patrimonio que no consta que justifique con los ingresos ordinarios que hubiere obtenido por razón del cargo público que ostentó durante 23 años como presidente de la Generalitat. Además, en el auto se menciona que no consta la realidad del legado hereditario mencionado en el comunicado que hizo público en julio de 2014.

Continúa el juez señalando que, de acuerdo con la investigación, «no consta negocio jurídico alguno» que justifique los incrementos patrimoniales. «Al contrario, existen operaciones financieras anómalas y movimientos financieros que, por tratarse de efectivo, ponen de manifiesto operaciones extrañas a las prácticas comerciales ordinarias».

Además, continúa advirtiendo de que existen numerosos contratos aparentemente simulados, sin causa real, sin contenido y sin entregables contrastables, para justificar los ingresos de grandes cantidades de dinero, y se han facilitado explicaciones contradictorias. «En definitiva, no existen negocios ilícitos que justifiquen este incremento patrimonial o las transmisiones dinerarias».

Según reseña el juez, muchas de las empresas que suscribieron tales contratos tienen en común que han sido y son adjudicatarios de contratos de servicios y obras públicas, así como que existía un acuerdo «entre las partes» para atribuir a Jordi Pujol Ferrusola el rol de gestor y distribuidor de los recursos entre los hermanos y la madre, así como que ha quedado acreditada la existencia de «complejos entramados societarios en distintas jurisdicciones, manejados por testaferros, sin objeto social y actividad societaria aparente».

A lo anterior se añade, dice De la Mata, «la distribución de enormes cantidades de dinero entre miembros de la familia/organización, sin causa aparente, con causas improbables o con explicaciones y/o coartadas no justificadas mínimamente».

En otro de los autos dictados hoy por el juez de la Audiencia Nacional se acepta por conexidad la competencia de la causa que investigaba la juez de instrucción 31 de Barcelona contra varios de los miembros de la familia Pujol y su acumulación a la causa que instruía De la Mata, si bien no se ha solicitado por el momento la remisión de los originales al no ser firme la resolución por estar a la espera de la resolución de los recursos.

En esta resolución, el magistrado afirma la existencia de indicios de que «los miembros de la familia Pujol Ferrusola han venido orquestando durante años una estrategia compartida y coordinada para desarrollar distintos negocios económicos, generar réditos, ocultarlos y distribuirlos entre todos de acuerdo con criterios establecidos para conseguir el lavado de los activos conseguidos».

En las 11 resoluciones restantes el juez acuerda una batería de diligencias, entre ellas, la citación de nuevo de Jordi Pujol Ferrusola, a petición propia, para el 11 de febrero o la declaración de varios testigos. Además, se rechaza el sobreseimiento solicitado por Alejandro Guerrero Kandler y Carles Vilarrubí y se resuelven todos los recursos plateados por las defensas respecto de las diferentes medidas cautelares adoptadas, así como de las entradas y registros practicados.

La Fiscalía recordó hace casi un mes que «desde 1992» Jordi Pujol Ferrusola (alias Júnior) y su esposa, Mercè Gironès, fueron titulares de hasta 12 cuentas en entidades de Andorra. Y subraya que «se desconoce el origen de esos fondos» (buena parte, en efectivo) que después Júnior repartía «entre todos sus hermanos y su madre, en cantidades iguales o similares». El expresident catalán no es ajeno a los fondos de Andorra, sino que es el «nexo común de todos ellos». Parte de los fondos, agrega, se transfieren «a cuentas bancarias en bancos suizos y luxemburgueses» sin que conste la razón aparente de esos traspasos.

El 26 de octubre pasado, el juez acordó la mayoría de registros pedidos por la fiscal Belén Suárez. La Policía irrumpió en las casas de tres de hijos del expresidente catalán (Jordi, Josep y Pere), así como en las de empresarios que pagaron al hijo mayor a cambio, presuntamente, de que mediara para lograr adjudicaciones. La investigación abarca ya a toda la familia e indaga, de lleno, el origen de la fortuna que los Pujol mantuvieron oculta en Andorra durante tres décadas.

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