Hoy ha comenzado la visita del Papa á Camerún y se alargara hasta el 20 de marzo.

El gran inquisidor.

Benedicto XVI hace esta semana el primer viaje a África de su pontificado y pedirá a los paí­ses desarrollados que afrontan la crisis económica que no olviden al continente en el que la supervivencia es una lucha diaria para millones de personas Según las proyecciones de la ONU, el número de africanos que vive en condiciones de pobreza extrema – con menos de un dólar al dí­a – aumentará a 404 millones en 2015. Unos 800 millones padecen hambruna crónica y la crisis ya está afectando a las remesas de los emigrantes africanos, al perder sus empleos en el exterior

Joseh Alois Ratzinger, el Papa Benedicto XVI, está marcando una dirección extra conservadora a la política de la Iglesia Católica. Durante el papado de Juan Pablo II, el entonces cardenal Ratzinger era el jefe de la Congregación por la Doctrina de la Fe (CDF) que realiza el mismo papel que en su tiempo la Santa Inquisición (de todo menos Santa) para acabar con la herejía. Ratzinger es el ideólogo responsable de la elaboración de la línea oficial política y “espiritual” del Vaticano Ratzinger ha calculado todo por adelantado, ha tenido más de veinte años para preparar su mandatoJoseph Alois Ratzinger se ganó el apoyo de "la rata" entre sus colegas universitarios, por tener todas las apariencias de un "gran inquisidor" que parece ser la vieja consigna conservadora: "habla suavemente y lleva un gran palo". El bulldog Ratzinger, un nombre que le dieron los medios de comunicación antes de convertirse en papa.Con el resurgimiento del fundamentalismo islámico y judío, el ascenso del seguidor de la línea dura baptista, George W. Bush. Ahora el mundo católico tiene su fundamentalista la perfección del fundamentalismo ha llegado con manifiestas ideas del Papa Ratzinger. La teoría de Ratzinger es completamente anti-humanista. Su opinión de que Jesús solo es "verdaderamente humano" revela la creencia en que la forma humana física es una falsificación de la figura de Cristo, alguien que nunca puede ser "verdaderamente humano". Sólo a través de Cristo. De esta manera, Ratzinger niega al ser humano su calidad de persona. Esta postura es fundamentalista. Ha sido utilizada como una excusa eficaz de las crueldades históricas perpetradas por la Iglesia Católica, como la conversión forzosa de los pueblos indígenas de América Latina o el desprecio a la vida por parte del Vaticano que ha hecho apoyar a dictaduras, tiranos y genocidios.

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