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El Banco de España echa una mano a Rubalcaba

Cuando todavía no se han acabado los ecos de quien ha conseguido salir victorioso en el debate del estado de la nación, el informe económico del Banco de España de mes de febrero le echa una mano al líder socialista, Alfredo Pérez Rubalcaba. Aunque no ha salido malparado el secretario general del PSOE tampoco ha salido ganador pese a la serie de medidas antipopulares que ha tomado Mariano Rajoy durante los dos años de su mandato. Por eso el análisis de Sergio Puente y Sofía Galán, de la dirección general del servicio de estudios del Banco de España, le supone un apoyo momentáneo. El informe dará que hablar.

En su breve análisis de los efectos composición sobre la evolución de los salarios, concluyen tajantes que el proceso de moderación salarial que comenzó en 2010 podría ser algo más intenso de lo que indican las estadísticas agregadas sobre costes laborales. Esto que dicen de ‘podría ser algo más intenso’ es mucho más que algo, `pues supone nada menos que el doble de lo que dicen las estadísticas oficiales.

Bien es cierto que no es la primera vez que un informe señala la pérdida del poder adquisitivo de los trabajadores españoles. En un informe realizado por los servicios de la Comisión Europea, durante el mandato de Joaquín Almunia como comisario de Asuntos Económicos y Monetarios, dieron a conocer que el único país de la OCDE en el que los trabajadores habían perdido poder adquisitivo en la década de 1996 a 2005 era España.

Cándido Méndez, en respuesta a la pregunta planteada sobre esta cuestión en los desayunos del Foro de la Nueva Economía, explicó que las cifras tenían una justificación sencilla de entender. Se acababan de incorporar en los últimos años casi 4 millones de trabajadores extranjeros que lo habían hecho por la parte más modesta de los salarios, lo que producía que se hubiera producido una caída de los mismos en las cifras medias, sin que en la realidad los trabajadores hubieran perdido poder adquisitivo.

Méndez aludió a los convenios firmados en los últimos años que venían a contradecir las cifras de la Comisión, si no fuera por los argumentos de líder sindical. Ahora la explicación es justamente la contraria. El despido de los trabajadores más jóvenes y con menores nóminas lleva a la conclusión que el resultado es que la pérdida salarial ha tenido que resultar superior a la reconocida oficialmente. El modelo aplicado por Puente y Galán echa por tierra parte del optimismo oficial del partido que apoya al Gobierno y viene a dar la razón al núcleo central de la intervención de Pérez Rubalcaba en el debate del estado de la nación.

Por eso Rubalcaba le preguntaba a Rajoy, en algún momento con tono algo chulesco, ‘¿de qué presume?’. Con un millón de puestos de trabajo que se han perdido en su mandato, de las ayudas que se han quitado a las familias por la dependencia, de subir la deuda pública a niveles desconocidos o de subir los impuestos a las clases medias como nunca en la historia de la democracia, lo que conlleva un mayor empobrecimiento de los pobres, no parece que se pueda presumir de nada.

Si tenemos en cuenta el trabajo del Banco de España sobre la evolución salarial agregada del mercado laboral español, la situación ha ido a peor, pues se ha visto inflada de forma artificial por la pérdida de peso relativo de quienes menos cobran.

Es un debate que no queda aquí. No es necesario volver a contrastar estas bajadas con los aumentos de los ingresos de los miembros de los consejos de administración de las 35 empresas del Ibex. Porque la política restrictiva de Europa, además de haber empobrecido a la población, ha generado un problema muy importante sobre el modelo adecuado para recuperar el crecimiento de un país o de una zona económica, tras una crisis tan profunda como la actual. El FMI, teoría a la que se ha adherido ahora la OCDE, considera que EEUU lo ha hecho mucho mejor que Europa en la aplicación de medias para recuperar el crecimiento. Es el gran reto que afronta el nuevo ejecutivo comunitario que saldrá de las elecciones del próximo 25 de mayo.

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