La Asociación contra el Acoso Escolar denuncia 9117 denuncias directas por acoso escolar entre alumnos La Asociación Contra el Acosos Escolar (ACAE) fue fundada en el año 2005 tras el suicidio, en la población de Hondarribia, del joven guipuzcoano Jokin. El muchacho fue la victima del acoso escolar que marco un antes y un después.
Según ACAE, el roblema del coso escolar ha existido siempre, pero en los últimos años se está disparando alarmantemente.Según los informes de esta asociación es entre las clases medias y altas, en colegios concertados donde la tasa es mayor, con más del 80 %; es en las escuelas de la clase trabajadora donde baja este problema y hay mayor atención por parte del profesorado y más tranquilidad entre el alumnado.La primera comunidad afectada es Valencia seguida del País Vasco. Solo en Euskadi se concentra el 22 % de las llamadas de denuncia. A ACADE le sorprende que con las posibilidades del Gobierno Vasco no se hayan puesto medida ninguna para frenar el hostigamiento escolar.El Gobierno Vasco ha respondido que es “muy grave que algunas personas conviertan la alarma social en su forma de vida”. Además tachó los informes de ACAE de injustificados y con falte de rigor.Mientras el Gobierno Vasco en su consejería de educación vive su epopeya de implantar el Euskera en todos los ámbitos posibles, además de educativo, los problemas reales de los educados, los niños pasan desapercibidos.¿Datos injustificados y con falta de rigor? Para el Gobierno Vasco es de falta de rigor los estudios e informes que se desprenden de 9.117 denuncias. Como se nota que estamos en elecciones. No importa lo que sea, su gravedad, o como le afecte a la sociedad vasca. La cuestión es ocultarlo, se creará la imagen social de “los unos dicen una cosa, los otros otra, lo de siempre”. Pero mientras el circo electoral del Gobierno Vasco, que pasa por ocultar muchas cosas más, continúa en Euskadi, hay algo menos de 200 denuncias por acoso escolar a menores. Solo denuncias, porque probablemente la realidad supere la estadística.Lo normal y democrático sería dar una respuesta de conjunto desde el mismo Ministerio de Educación para toda España, para los casos de Valencia, Euskadi y Extremadura. Pero aquí cada comunidad tiene su propia educación. Mientras los poderes políticos locales cuentan la historia como les conviene la educación de los niños pasa a un segundo o tercer plano