SELECCIÓN DE PRENSA NACIONAL

Cospedal contra Rajoy

Ya lo dijo Cospedal meses atrás cuando aparecieron los primeros papeles de Bárcenas: ‘que cada palo aguante su vela’. Y ahora lo acaba de repetir culpando a Rajoy y Arenas del contrato que se le hizo al extesorero cuando dejó su cargo financiero en el PP, algo que ella había ocultado a los medios durante meses y después de justificar, mintiendo, que el último y jugoso contrato de Bárcenas era un ‘finiquito diferido’. Lo que no tiene pies ni cabeza porque ese contrato era laboral por una supuesta asesoría del extesorero a la dirección del PP, con nómina, seguridad social e IRPF, lo que anuncia que Bárcenas le ganará al PP el despido improcedente al que fue sometido cuando se hizo pública dicha contabilidad ‘B’ del PP. La que confirma la existencia de una financiación ilegal de este partido y el pago en dinero B de sobresueldos a los altos cargos de la organización.

Cosas estas últimas que Cospedal dice haber desmentido ante el juez Ruz del caso, que ha impedido a las acusaciones particulares que hicieran preguntas comprometidas a Cospedal, como aquellas relativas al caso de una comisión de 200.000 euros al PP toledano cuando ella ya era presidenta del PP manchego.

Sin embargo, lo más notorio de Cospedal es su firmeza a la hora de rechazar cualquier responsabilidad en el caso Bárcenas o el de Gürtel, que forman parte de la historia reciente del PP y que, sin duda, afectan tanto a José María Aznar -que está callado como un muerto- como a Mariano Rajoy, y por supuesto a Cascos, Arenas y a otros muchos dirigentes del partido.

De manera que Cospedal se sacude el polvo del pasado reciente del PP después de haber provocado, al enfrentarse con Bárcenas años atrás, todo un incendio en el ‘polvorín’ de la financiación de su partido . Con lo que la señora ha dejado a la intemperie al que es su presidente del Gobierno y del PP, mientras desde su entorno político y mediático -donde ella ya ha ocupado bastante poder- se hace circular la especie de que Cospedal lidera la ‘renovación’ del PP en contra los casos de la corrupción y las malas costumbres del pasado reciente del partido, y que por lo tanto ella también está en la carrera de la sucesión de Rajoy, como lo publicaba hace pocos días el diario El País.

Lo que sumado a su declaración ante el juez habrá provocado un profundo malestar en el palacio de la Moncloa, donde habita junto a Rajoy la que es su principal enemiga política: la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría. Una trifulca interna esta que a buen seguro será objeto de más informaciones y críticas del diario El Mundo, que está en guerra abierta contra Rajoy, alimentando a la oposición del PSOE, y en una guerra particular con Cospedal, en agradecimiento a las exclusivas habladas y documentales que al periódico le ha regalado Luis Bárcenas, el que odia ‘a muerte’ a la secretaria general. De ahí los recientes reportajes de El Mundo sobre las andanzas financieras del marido de Cospedal, Ignacio López del Hierro, alguna de la cuales aún están por dilucidar.

Desde luego Cospedal está siendo temeraria y coherente porque: se enfrentó a cara de perro con Bárcenas en el PP, mientras Rajoy le mandaba cariñosos SMS; le ha puesto un par de demandas por injurias al extesorero; y ahora declara ante el juez que el último contrato de Bárcenas con el PP es cosa de Arenas y de Rajoy, y que ella en eso no ha tenido nada que ver. ¿Por qué no lo dijo antes? Pues porque como testigo corría riesgo si mentía ante el juez, y al final decidió hacer esa ‘confesión’.

Que ya veremos los efectos que tiene porque Rajoy no perdona y Soraya no perderá la oportunidad de responder, sobre todo ahora que se ha sabido que ‘su’ López del Hierro era alto consejero de la Caja de Castilla La Mancha que fue intervenida por el Banco de España y luego se ha sacado un jugoso contrato -puede que en ‘diferido’- con Liberbank, el banco que se ha quedado con la Caja manchega rescatada, lo que es para sospechar. Máxime cuando la Fundación de dicha Caja aún depende del Gobierno manchego que preside Cospedal.

En todo caso y, como dice la manchega, que cada palo aguante su vela en esta procesión del PP que parecía la del silencio y que va a acabar como el rosario de la aurora, a farolazos. Lo de Cospedal ayer ante el juez Ruz es, en ese sentido, toda una señal.

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