«Hay un parto histórico, un parto mundial. La nueva geopolítica mundial está en marcha. Está naciendo un mundo y caen los imperios», subrayó Chávez.
El residente de Venezuela, Hugo Chávez, expresó este lunes a su llegada a Doha, Qatar, donde participará en la segunda cumbre de América del Sur – Países Árabes (Aspa), que esta es una oportunidad para «perfilar un mundo nuevo, sin imperialismo».Chávez ofreció estas declaraciones a medios locales a su llegada, donde expresó que este encuentro «es una gran oportunidad para perfilar el mundo nuevo, el mundo multipolar, de naciones libres e independientes».Agregó el jefe de Estado que este encuentro genera grandes expectativas para ambas regiones y precisó que es una gran oportunidad para discutir temas de interés común y perfilar «ese mundo nuevo sin imperialismo».El presidente venezolano, Hugo Chávez, defendió este martes, a su llegada a Qatar, al presidente de Sudán, Omar el Bechir, reclamado por la Corte Penal Internacional (CPI), y pidió que ésta detenga al ex presidente estadounidense George W.Bush por «genocida».»¿Por qué no ordenarán la captura de Bush? ¿Por qué no ordenarán la captura del presidente de Israel?», se preguntó Chávez, en referencia a la orden de detención emitida por la CPI con sede en La Haya contra Bechir el 4 de marzo pasado, por crímenes de guerra y contra la humanidad en Darfur.El Jefe de Estado venezolano instó a los países a ocuparse del desarrollo humano de los pueblos, el desarrollo social, la lucha contra la miseria, la pobreza, «porque este nuevo mundo multipolar está naciendo y hay que tener cuidado e irlo perfilando».»Hay un parto histórico, un parto mundial. La nueva geopolítica mundial está en marcha. Está naciendo un mundo y caen los imperios», subrayó Chávez.Chávez enfatizó que este nuevo mundo se creará en base a la «justicia internacional y con caminos abiertos al desarrollo humano, social».Asimismo, manifestó su apoyo a la creación de una nueva moneda de referencia para las reservas internacionales, como propusieran los gobiernos de Rusia y China.»Apoyamos con fuerza propuestas como esta», acotó al tiempo que recordó las propuestas que Venezuela ha presentado para la el establecimiento del Sucre como una moneda común de intercambio entre los países del Sur. En esta cumbre, los mandatarios debatirán sobre la crisis financiera mundial y su impacto en las dos regiones, así como temas relativos a la cooperación Sur-Sur.Chávez señaló el domingo, en entrevista exclusiva con el canal qatarí Al Jazeera, que este encuentro bi-regional constituye una gran oportunidad para consolidar la integración de Suramérica y el mundo árabe, en función de sus respectivas potencialidades e independientemente de las corrientes ideológicas o los signos políticos.El presidente Chávez aseguró que Venezuela tiene una profunda relación con los países árabes, ya que tiene trato de amistad personal con presidentes, emires, reyes y altos mandatarios de las naciones árabes.»Tenemos una compenetración de alma y afecto, en este mundo nuevo de pueblos amigos. Venimos con una serie de ideas, de planteamientos que tienen años. Insistimos en el mundo multipolar, un mundo post imperio. Le llegó la hora de la caída definitiva al imperio yanqui».Por otro lado, Chávez manifestó que entre los 12 países que conforman la OPEP, nueve se encuentran en Aspa, Argelia, Libia, Irak, Arabia Saudí, Qatar, Emiratos Árabes, Kwait, Ecuador y Venezuela, lo cual le da un peso importante a la cumbre.»También están presentes otros grandes productores de petróleo y gas, como Egipto, Sudán, Brasil, Bolivia».»Esto podría llevar a plantearnos acuerdos bilaterales, porque América Latina, tiene un gran potencial energético, acuífero ambiental y alimentario (…). A todas luces aqui pudiera nacer una alianza energética y alimentaria entre los países árabes y los países del sur».Ante la consulta de periodistas sobre una posible visita de Chávez a la Franja de Gaza, el mandatario expresó: «tengo gran solidaridad con la causa palestina. Ojalá algún día vaya a Palestina y mire con mis ojos esa tierra sagrada».Asimismo, Chávez, acusó a la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, de poner en peligro la unidad sudamericana por haber invitado a la cumbre progresista de Viña del Mar a Estados Unidos y Gran Bretaña. «Hay unos progresistas por ahí que no entiendo (…). No le hacen nada bien a la unidad de Suramérica cuando la presidenta de Chile convoca a una reunión con el vicepresidente de Estados Unidos y el primer ministro británico», Joe Biden y Gordon Brown, dijo. «¡Dos representantes de los imperios!», agregó, refiriéndose a Brown y Biden. «Creo que eso pone el peligro la unidad suramericana», insistió Chávez.La visita se inscribe en una gira que le llevará de Doha a Irán, Japón y ahora a China. Venezuela y China mantienen una estrecha cooperación en los ámbitos energético, financiero e industrial, destacándose sobre todo sus acuerdos en los ámbitos armamentístico y espacial.En estos días de descontento estadounidense uno suele escuchar o leer a los expertos que hablan del fin del período de «pax americana» en el mundo y la muerte cercana del unilateralismo de Washington. Si uno cree que ese debate es abstracto debe entender estos ejemplos para darse cuenta de cuál es la temática.El problema no es unidimensional. Del mismo modo que la ayuda de China en África y América Latina, la de Irán al Líbano y la Franja de Gaza (en realidad a Hezbola y Hamas) y la de Venezuela a Cuba y Nicaragua, habría que contabilizar la idea de Rusia de apostar parte de su flota de guerra en Cuba y Venezuela. La «doctrina Monroe» hubiera hecho befa de estas intenciones pero, en los hechos esa doctrina está hoy más para el museo que para funcionar como política. La fuerte apuesta del frente antihegemonista por las relaciones multilaterales, la integración regional, su apertura a las relaciones con todos los países emergentes, le abren un abanico de posibilidades de desarrollo, que el llamado mundo unipolar en manos del imperialismo no le permitía.