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El servicio de inteligencia NSA de Estados Unidos ha estado dirigido contra la la Unión Europea en sus actividades de espionaje. De acuerdo a la información obtenida por Der Spiegel, EEUU colocó mecanismos de espionaje en la representación de la UE en Washington y se infiltró en su red informática. Los ataques cibernéticos contra Bruselas también se perpetraron en Nueva York y Washington.La información obtenida por Der Spiegel revela que la Agencia de Seguridad Nacional de Estados Unidos (NSA), no sólo lleva a cabo la vigilancia en línea de ciudadanos europeos, sino que también parece haberse dirigido específicamente a los edificios ocupados por las instituciones de la Unión Europea. Esta es la información que aparece en los documentos secretos obtenidos del denunciante Edward Snowden, a los que Der Spiegel ha tenido acceso en parte. Un documento «top secret» de 2010 describe cómo los servicios secretos atacaron la representación diplomática de la UE en Washington.El documento sugiere que, además de la instalación de elementos espía en el edificio en el centro de Washington DC, la red informática europea de la representación de la Unión también fue infiltrada. De esta manera, los estadounidenses fueron capaces de acceder a los debates en las salas de la UE, así como a los correos electrónicos y los documentos internos de los equipos.Los ataques a las instituciones de la UE muestran un paso más en el amplio alcance de las actividades de espionaje de la NSA. Desde hace varias semanas, nuevos detalles sobre otros programas de vigilancia Prism han ido surgiendo a lo que había sido compilado por el denunciante Snowden. También se ha puesto de manifiesto que el servicio de inteligencia británico GCHQ opera con un programa similar bajo el nombre Tempora con el que se controlan las conexiones telefónicas y de Internet globales.Los documentos a los que Der Spiegel ha tenido acceso indican que la representación de la UE en las Naciones Unidas fue atacado de una manera similar a la forma en que se llevó a cabo la vigilancia contra sus oficinas en Washington. Un documento de la NSA de fecha septiembre de 2010 nombra de forma explícita a los europeos como «objetivos de localización».Los documentos también indican que los servicios de inteligencia de EEUU fueron responsable de una operación de espionaje electrónico en Bruselas. Hace poco más de cinco años, los expertos en seguridad de la UE se dieron cuenta de varias llamadas telefónicas que aparentemente tenían como objetivo el sistema de mantenimiento remoto en el edificio Justus Lipsius, donde se encuentran el Consejo de Ministros de la UE y el Consejo Europeo. Las llamadas se hicieron desde números que eran muy similares a los utilizados para la administración remota del sistema de teléfono del edificio.Los funcionarios de seguridad lograron rastrear las llamadas a la sede de la OTAN en las afueras de Bruselas, en Evere. Un análisis preciso muestra que los ataques contra el sistema de telecomunicaciones se habían originado a partir de un complejo de edificios separados del resto de la sede de la OTAN que es utilizado por expertos de la NSA.Un examen del sistema de mantenimiento a distancia mostró que sus orígenes venían varias veces precisamente de ese complejo de la OTAN. Todos los Estados miembros de la UE disponen de habitaciones en el edificio Justus Lipsius que pueden ser utilizados por los ministros de la UE. Donde también tienen conexiones telefónicas y de Internet a su disposición.