Zapatero recorta casi 800 millones de euros de gastos sociales

¿Y por qué no se recortan los planes de rescate de la banca?

Para hacer frente a la reducción de ingresos públicos producto de la crisis, Zapatero se comprometió el pasado 10 de febrero a recortar todos los gastos financieros previstos en los presupuestos, excepto los destinados a polí­ticas de protección social. El desglose de estos recortes, que el gobierno se ha visto obligado a publicar merced a una pregunta parlamentaria, demuestran que Zapatero, por enésima vez, mintió: la tijera se ha llevado por delante casi 800 millones de gastos sociales.

El ajuste resupuestario, valorado en 1.500 millones de euros, es según declaraciones del gobierno, “resultado de una negociación con todos y cada uno de los ministerios centrada en actividades que se pueden aplazar o simplemente no realizar, se ha actuado en aquellos gastos que no se considera prioritarios”.Pues resulta curioso que gastos considera “no prioritarios” el gobierno de Zapatero, y por tanto les ha aplicado un drástico recorte.Se reconocen recortes sociales de 59 millones de euros para el Fondo de apoyo a la acogida e integración de inmigrantes, 12 millones del Imserso, 2.4 pertenecientes al Plan de acción para discapacitados, y 3.01 millones para el apoyo de la "parentalidad" positiva, entre otros.Además, se reducen 33,8 millones de los dedicados a seguridad ciudadana, 40 del programa para la gratuidad del segundo ciclo de educación infantil, y casi 15 millones del crédito para becas o educación secundaria.En otro terreno, el ministerio de Asuntos Exteriores ha visto recortada su partida en 73,1 millones. Pero no se han reducido los gastos burocráticos, sino los destinados al Fondo de Ayuda al Desarrollo, es decir a la cooperación internacional.Tan significativo es dónde se recorta como las partidas a las que Zapatero no quiere quitar ni un solo euro.Todavía esperamos el anuncio de una severa reducción del derroche a manos llenas del dinero público en privilegios para la partitocracia. Por ejemplo la paralización de las obras en el edificio de la vicepresidencia, valoradas en diez millones de euros.O un drástico recorte en los gastos burocráticos, tanto en la administración central como en las autonomías, auténtico agujero negro donde se consumen los recursos públicos.Y, evidentemente, Zapatero no ha querido recudir un solo euro de los multimillonarios planes de rescate para la banca pagados con dinero público.Si el ajuste presupuestario tenía como objetivo “hacer frente a los mayores gastos en prestaciones por desempleo”, podemos realizar un simple ejercicio. Todos los gastos en subsidios a los parados suman 34.000 millones de euros. Sólo recortando un 10% el dinero empleado en rescatar a la banca (los 250.000 del primer plan de rescate y los 90.000 que se anuncian para el segundo), habría dinero suficiente para pagar todas las prestaciones por desempleo sin acumular un solo céntimo en déficit.Pero, claro está, para Zapatero hay “partidas prioritarias” y otras absolutamente desechables.Adivinen en qué categoría están los planes de rescate a la banca, y en cual las prestaciones sociales.

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