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Vueling aterriza con un nuevo ERE

Vueling sigue con su proceso de reestructuración y reorganización de los últimos meses. Debido a su fusión con Clickair, la empresa en su proceso de ajuste presenta un Expediente de Regulación de Empleo que afectará a unos 80 trabajadores.

En los últimos meses Vueling ha resondido a la crisis reduciendo su flota de aviones y destinos al pasar de 24 a 16 aviones y llegar a la fusión con Clickair. La nueva Vueling tendrá 35 aeronaves, operará 90 rutas y facturará 800 millones de euros en el primer año completo de operaciones.Respecto a los ajustes de plantilla, existe una cincuentena de personas en oficinas a las que se intentará incentivar con bajas voluntarias, aunque todavía no se ha concretado qué departamentos estarán afectados.Sin embargo, lo peor del ERE afectará a unos 80 trabajadores del departamento de mantenimiento. Tras el expediente quedarán en el departamento de mantenimiento una decena de trabajadores. Algunos de los empleados despedidos se recolocarán en Iberia, la mitad de manera inmediata y el resto progresivamente. Estos trabajadores perderán su antigüedad, no mantendrán su salario y, además, Iberia no está obligada a contratarlos. Una situación diferente es la que afecta a unos 110 empleados del servicio de tierra handling, la mayoría de los cuales se subrogarán a la empresa Groundforce, que realiza el handling a Iberia, con lo que mantendrán las condiciones de trabajo. En total el ERE afectará a unos 200 trabajadores de una forma u otra. Así lo planteó el presidente de Vueling, Josep Piqué en su última Jinta de accionistas a principios de mes.El proceso de creación de Vueling tuvo dificultades de tipo técnico que se concreta en la formación de técnicos especializados de mantenimiento de aviones. El poder de Iberia llenó de dificultades la formación de una plantilla competente. Con la fusión, de nuevo se hace necesario la comparación y la integración de ambas plantillas en donde la de Vueling sale claramente perdedora en este ámbito. Aun así, a medida que la situación econó,ica se vaya restableciendo previsiblemente, estos TMAs y otros técnicos de mantenimiento han de encontrar acomodo en el siempre creciente mundo del transpore aéreo. Ejemplos como las nuevas terminales de aeropuertos como los del Prat de Barcelona, Barajas en Madrid o los nuevos aeropuertos de Castilla la Mancha los inscriben como un valor estratégico seguro.

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