UPyD ha celebrado con éxito su Primer Congreso en Madrid

UPyD, un Congreso democrático

Unión Progreso y Democracia (UPyD) celebró su Primer Congreso en Madrid los dí­as 20, 21 y 22 de noviembre. Dos años, un mes y tres semanas después de su fundación en la Casa de Campo de Madrid el 29 de septiembre de 2007 y de acuerdo con lo establecido en los Estatutos, vigentes desde entonces, se ha desarrollado durante meses un proceso congresual con un claro carácter democrático que ha tenido su culminación el pasado fin de semana. Un Congreso de nuevo tipo. Un Congreso de participación democrática. Un Congreso de afiliados libres e iguales. Un Congreso para llevar con más fuerza a todos los ciudadanos españoles la alternativa necesaria para la regeneración democrática en España.

Todo el desarrollo, incluyendo el roceso previo al propio periodo de sesiones, ha demostrado en los hechos una forma nueva, democrática, de participación de los afiliados, frente a la “tradicional” manera de los partidos burocráticos. Todos los afiliados han podido presentar, en un amplio plazo, tantas enmiendas como hayan querido a las cinco ponencias fijadas, cuatro de principios y línea política, y una de estatutos. Lo que produjo más de 3.700 enmiendas. Se ha realizado un ímprobo trabajo de ordenación, agrupación y valoración que ha dado lugar a que se hayan aceptado muchas e incorporado a las respectivas ponencias y a que las otras enmiendas se hayan podido abordar durante el Congreso. Lo que ha permitido su defensa y su votación. Se ha posibilitado el derecho de cada afiliado a presentar enmiendas, y el derecho de los delegados a votarlas.Respecto a los distintos órganos, en contraposición a los partidos burocráticos, cualquier afiliado ha tenido el derecho a presentarse sin necesidad de avales, sólo o en compañía. Presentarse a delegado al Congreso. Presentarse a Portavoz del partido, el cargo de mayor responsabilidad, junto con un equipo de 20 afiliados más, para formar el Consejo de Dirección, para su votación en lista cerrada. Presentarse al Consejo Político en una lista abierta. Presentarse a las Comisiones de Garantías, de Finanzas y a la Electoral. El derecho a ser elegido y el derecho a elegir. Todos los afiliados de UPyD en toda España han podido votar electrónicamente para elegir al Consejo de Dirección entre las dos candidaturas presentadas. Todos los delegados al Congreso han podido votar electrónicamente a los 110 miembros elegibles del Consejo Político de una lista de 438 candidatos. Así como a los integrantes de las tres Comisiones citadas.Y un Congreso que, como todo lo que ha hecho UPyD desde antes de su nacimiento oficial, se ha hecho en medio de dificultades de todo orden y condición. Desde su misma convocatoria y aprobación del reglamento surgió un oleaje de críticas que parecieron al principio de índole interna y de respeto a las normas. Pero que inmediatamente se convirtieron en un sistema de descalificaciones no sólo internas sino externas. Lo que es obviamente una manera de romper la unidad y debilitar el proyecto.Oleaje que se fue convirtiendo en un intento de hundir la piragua. Llegando a utilizar recursos como una demanda judicial para imposibilitar la celebración del Congreso. Oleaje que levantaba falsos “argumentos políticos” y falsas banderas de “democracia interna”, tales como “estamos de acuerdo con el proyecto político fundacional y la labor parlamentaria desarrollada pero el núcleo fundador y toda la estructura organizativa existente es autoritario”.No eran críticas, lo que es una práctica legítima, aunque ese fuera su disfraz. Era, en una cadena ciega, un serio ataque para abortar la vida creciente de esta alternativa necesaria. Para disfrute y beneficio de todas aquellas fuerzas sociales de toda índole cuyos intereses espurios el proyecto político de regeneración democrática de UPyD pone en peligro.

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