Televisión

Unidad Central Operativa

En esta ocasión no viajamos en el tiempo -después de las series de época a las que nos empieza a acostumbrar la cadena pública-, sino que nos quedamos en la actualidad para introducirnos en el trabajo de los cuerpos de investigación de élite de la Guardia Civil. Intentando huir del sensacionalismo, según sus responsables, pero fidelizando a la audiencia con tramas de suspense basadas en los casos reales que maneja este cuerpo policial. Desde la desarticulación de bandas y mafias hasta los delitos económicos o telemáticos, cubre todo el espectro de delincuencia. Los agentes que componen esta unidad, creada en 1987, han participado en algunos de los casos más conocidos de los últimos años en nuestro paí­s, como la desaparición del alcalde de Fago.

La Unidad Central Oerativa es la élite de la policía judicial del Instituto Armado, encargada de investigar la delincuencia especializada. Trabajan con las técnicas más avanzadas en investigación criminal, y, dada la envergadura de las operaciones que desarrollan, en numerosas ocasiones, cuentan con la colaboración de policías o servicios de información de otros países. Partiendo de esta realidad, el Grupo Ganga crea esta nueva producción para Televisión Española, que pretende seguir la estela de éxitos internacionales como C.S.I., pero fijándose en una realidad más cercana, la de los profesionales que ejercen este trabajo en nuestro país, y que sin duda siempre serán un filón inacabable para los guionistas de ficción. Aunque la ficción está sólidamente documentada, las tramas han sido modificadas para evitar cualquier coincidencia con la realidad. Están basados en la actividad diaria y real de la UCO, y sus procedimientos y verosimilitud están supervisados por verdaderos agentes de esta unidad. Cuestiones estas que sin duda otorgan credibilidad a cada una de las tramas, aunque sin perderse, afortunadamente, en el documentalismo o la propaganda. Como no podía ser de otra manera, uno de los reclamos más interesantes de esta nueva producción es el reparto. Actores de la talla de Miguel Ángel Solá o Ana Torrent, comparten protagonismo, acompañados por nombres tan ilustres como el de Sancho Gracia, Juan Echanove o la recuperada para la televisión Pastora Vega. Nombres que sin duda le otorgan prestigio y credibilidad a la serie. Profesionales de la interpretación que sin duda alguna son ya uno de los puntales más sólidos sobre los que descansa cualquier producción elaborada en España. No podemos evitar pensar que se trata de una especie de copia de algunos formatos americanos, y que pese a la calidad de las tramas, la propuesta no sorprende por su originalidad. Pero sin duda es digno de celebración el hecho de que la televisión pública mantenga consecuentemente la apuesta por la inversión en series autoproducidas, frente al despilfarro inútil en adquisición de productos extranjeros que somos muy capaces de producir nosotros mismos, aprovechando al mismo tiempo para activar una industria que vive en permanente crisis. Aquellos que gastan tanto presupuesto en comprar series de la Fox deberían tomar nota.

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