Una alternativa frustrada

El Vivero de Emresas ‘José Antonio Coto’ de Olloniego, comenzó como iniciativa hace cuatro años, ofreciendo unas instalaciones, asesoría y apoyo a precios por debajo de lo habitual, a jóvenes y emprendedores que se aventuraban en el mundo de la empresa, y para los cuales este vivero significaba una alternativa que se ajustaba con su presupuesto y expectativas.Cuatro años después la ocupación de las naves ha pasado de estar del 100% al 70% mientras muchas de las pequeñas empresas que ocupan este vivero se ven en situación crítica a la hora de hacer frente a los pagos. Es una muestra más de la destrucción de capital que deja tras de sí la crisis, con las consecuencias en producción de riqueza y empleo que esto significa.Queda de esta forma pendiente la apertura de las nuevas naves que comenzaron en época de bonanza y ante el éxito obtenido de este primer proyecto. Estas nuevas naves pretenden ser un acelerador de empresas y se centra en empresas con proyectos industriales. Una buena idea que cojea con la crisis, y que sin embargo podría significar una alternativa para muchas empresas industriales tocadas con la crisis. El problema fundamental con el que se choca es la falta de financiación, que lleva a muchas empresas a despedir a los trabajadores por falta de liquidez, empresas pequeñas que podrían salir adelante si la banca concediera los créditos de las inyecciones millonarias de 240.000 millones de euros que se les ha inyectado y que utilizan para cubrir sus agujeros y asegurarse sus beneficios esperados a costa de nuestro dinero público y de que a lo largo y ancho de muestro país las empresas se ven obligadas a echar el cerrojo.Es una buena idea este acelerador de empresas que en la crisis pueda ofrecer a precios económicos infraestructuras y las gestiones necesarias para salir adelante, para producir riqueza y empleo, para que esta crisis signifique que surjan numerosas alternativas para poder tener un tejido industrial sólido y en aumento, y que sin embargo, todas estas alternativas de ven frustradas por la falta de posición y voluntad política por solucionar los problemas reales de nuestra sociedad, de nuestra base económica, de nuestra riqueza y calidad de vida. Sin embargo, Zapatero sigue a la suya, ofreciendo ayudas que llegan tarde y desatinadas y que en muchos casos no llegan, o llegan con la sorpresa en esta declaración de la renta que unos pagos a efectuar por los ciudadanos que significan devolver el total de dinero recibido.Que el dinero público inyectado a la banca se destine para financiar pequeñas y medianas empresas y familias al 1% de interés, ese es el interés al que el Banco Europeo da en dinero, el resto solo significa la ganancia extra que Botín saca a costa de todos.