1.600 familias madrileñas quieren adoptar

Un nudo en el estómago

España es el paí­s en el que más adopciones se producen en términos relativos. El 90% se dan en el extranjero pero con muchas dificultades. Poco se habla del tema y no porque haya poco que decir

¿Por qué se da una relación de 10 a 1 entre la adoción internacional y la nacional? Desde mi punto de vista la diferencia estriba en que la legislación española no contempla la adopción plena, la patria potestad siempre la tienen los padres biológicos. El niño se da en un acogimiento pre-adoptivo y al cabo de tanto tiempo se celebra un juicio. Nunca se quita la patria potestad a los padres, aunque puede tutelarlos el Estado o la Comunidad, salvo que renuncien. Cuando vas a adoptar al extranjero es una adopción plena, sales del país con el niño inscrito en el consulado español, en tu libro de familia, con tus apellidos, y es tu hijo con los mismo derechos que uno biológico. La adopción en España no contempla eso. España es a nivel mundial el segundo en términos absolutos y el primero en términos relativos en adopciones, ¿por qué? Yo creo que aquí las familias quieren tener hijos. La solidaridad como absoluto no se contempla en la adopción, sería como querer conseguir un hijo para tu satisfacción, y lo que busca la adopción es el bien supremo del menor. Conseguir lo mejor para el niño. Claro que hay una parte de solidaridad. Hay matrimonios ya con hijos que van también a la adopción, por cualquiera de las dos razones o ambas. España es un país solidario y a parte las familias quieren ser padres. ¿Cuales son las principales dificultades a la hora de adoptar en el extranjero? Aquí en España hay que conseguir un certificado de idoneidad, si no lo tienes no puedes luego inscribir al niño con tu nombre. Se pasan todos los filtros y todos los controles, y una vez vas a adoptar al país de origen del menor te riges por la legislación del país y cada país tiene una legislación. Hay países como China o Colombia que lo tienen perfectamente regulado, y funcionan muy bien, aunque las listas de espera sean largas. También depende de que el país tenga firmado el Tratado de la Haya o no. En otros países, sobre todo en el este de Europa, todo vale. Pueden llegar a decirte que a parte de lo estipulado en el contrato hay que pagar tanto… eso se da. No se puede decir pero existe. La diferencia del nivel de exigencia en España con la realidad después fuera es enorme. ¿Cuáles son las principales exigencias de las familias? Lo que más preocupa es la salud de los niños. Por ejemplo, la legislación rusa prohíbe dar niños sanos en adopción, pero te puedes encontrar certificados médicos falseados… Sin embargo a los padres les exigen informes que prueben que no han padecido ninguna enfermedad, ¡como hipertensión u obesidad! Si es al revés y se supone que está sano… no te dejan hacer un chequeo con un médico distinto que no sea el del orfanato, y una vez se ha inscrito como tu hijo ya nada se puede denunciar. La inmensa mayoría de los padres aceptan a los niños aunque descubran que padecen alguna enfermedad, con todos los problemas que eso conlleva en sufrimiento para los padres y para el niño, y también en tiempo y dinero. Lo que hay es un vacío legal enorme, y cabe todo. Al final la carga es para las familias siempre. ¿Que crees que se debería hacer? De entrada en los países en los que no esté clara la legislación no adoptar. Yo no lo aconsejo. La Comunidad Autónoma se limita a hacer el certificado de idoneidad, luego están las ECAIs – Entidad Colaboradora de Adopción Internacional – que hacen de puente entre el Gobierno Español y el país de origen, pero no tienen mas fuerza que la de mero intermediario. También se puede hacer una adopción privada consiguiendo la idoneidad… contactan directamente con un abogado si el país lo permite. El estado solo da la idoneidad y lo inscribe en el libro de familia. Pero lo principal es un control en la salud y el bienestar de los niños y sus condiciones de vida, principalmente en los orfelinatos. En los países que más burocracia hay normalmente es por darle visos de legalidad, porque después es donde más irregularidades hay. Sin embargo lo que no hay es una atención a las familias o a los niños, pero ya no en los países donde se va a adoptar sino aquí en España. El proceso es duro, no consigues quitarte el nudo del estómago nunca, y llega a costarles la relación a muchas parejas que incluso se separan una vez ya han adoptado, pero eso no se tiene en cuenta. Igual que los problemas de los críos, suelen haber más en la adolescencia, pero bueno, ahí ya tienes que apañarte porque nadie te ayuda.Claro que existen algunas Comunidades que dan atención post-adopción y también la damos desde las ECAIs, aunque no todas. Pero no existe un estudio articulado y un plan de conjunto integrado… esto, de nuevo, lo acaban pagando las familias, bueno y las que estamos al pie del cañón que no te quitas las preocupación de encima. Aunque lo mejor son los niños, eso sí que es gratificante.

Deja una respuesta