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Desde hace dos meses, la administración Trump mantiene frente a las costas de Venezuela una formidable flota de guerra, a la que ahora se unirá el portaaviones más poderoso del mundo, el USS Gerald R. Ford.
Con la excusa de la guerra contra el narcotráfico, y dando luz verde -de manera pública- a la CIA para que realice «operaciones especiales» en el país caribeño, Washington incrementa su amenaza militar y su intervención para desestabilizar y derribar gobiernos latinoamericanos refractarios u hostiles a su dominio.
Tomando como pretexto el combate al narcotráfico, desde agosto de 2025 el gobierno de Trump mantiene frente a las costas de Venezuela hasta ocho buques militares: tres ultramodernos destructores lanzamisiles clase Arleigh Burke, un crucero, tres buques anfibios y un submarino nuclear. En ellos carga hasta 10.000 militares, cazas F-35B, drones MQ-9 Reaper, un grupo de asalto anfibio (con 4.500 efectivos, incluidos cerca de 2.220 infantes de Marina). Todos ellos juntos representan ni más ni menos que el 8% de la flota global total de la US Navy.
A esta formidable amenaza se une ahora el buque de guerra más grande del mundo, que ha abandonado las aguas del Mediterráneo y se dirige al Caribe. Es el portaaviones USS Gerald R. Ford, un leviatán de 100.000 toneladas con capacidad para llevar 90 aeronaves.
Esta flota de guerra no ha estado ociosa. Desde el 2 de septiembre, EEUU ha realizado al menos 16 ataques extrajudiciales contra embarcaciones en el Caribe y en el Pacífico. Identificándolas son pruebas como «narcolanchas», no las ha abordado, para arrestar a sus tripulantes y averiguar si son agentes del narcotráfico o no. Las ha volado en mil pedazos sin hacer preguntas. Al menos 64 personas han muerto.
Algunos de estos asesinatos extrajudiciales han sido contra barcos de pescadores colombianos, por lo que el presidente Gustavo Petro ha llevado el caso a los tribunales internacionales, para cólera de Trump.
Al mismo tiempo, a mediados de octubre, se hacía público que Trump había dado plena autorización a la CIA para realizar operaciones encubiertas dentro de Venezuela, incluidas incursiones terrestres dentro del país sudamericano, así como en aguas del Caribe.
Preguntado por Nora O’Donnell, una periodista de la CBS por si EEUU iba a iniciar una guerra contra Venezuela, Trump respondía un «Lo dudo. No lo creo», pero luego aseguraba que «Maduro tiene los días contados». Interrogado por O’Donnell si la campaña actual contra las lanchas iba a entrar en una “segunda fase”, con «operaciones encubiertas de la CIA en tierra», Trump re