Tripartito en crisis

Cataluña es una de las comunidades donde el imacto de la crisis está siendo mayor. El tradicional tejido industrial catalán decrece cada día a golpe de EREs y quiebras, dejando un interminable reguero de paro.Y esta realidad se ha dejado sentir en los resultados electorales. José Montilla, presidente de la Generalitat, ha querido salir del paso declarando que "Cataluña es una vez más de izquierdas y catalanista". Pero los votos han sido una auténtica moción de censura a la “política anticrisis” del tripartito.En primer lugar, Cataluña ha pulverizado la ya elevadísima tasa de abstención, alcanzando ocho puntos más que la media del conjunto de España.Si en la consulta europea de 2004 los ciudadanos que prefirieron no acercarse a las urnas fueron 3.208.407 (el 60,2% del censo), ayer se superaron: 3.281.481 (62,46%). Además, los votos en blanco se multiplicaron por cinco: 57.457 (2,94%) frente a los 11.657 (0,55%) de hace cuatro años.La distancia entre los electores catalanes y el conjunto de la clase política jamás había sido tan grande.Y la abstención se cebó especialmente en el tripartito gobernante. Además de los casi siete puntos que pierde el PSC, Esquerra Republicana asume un retroceso de 2,6 puntos y se queda con el 9,2% de los sufragios. Mientras, Iniciativa-Esquerra Unida (ICV-EUiA) pierde más de un punto y medio de cuota electoral y se queda con el 6,1%.Los tres grupos del tripartito suman el 51,1% de los votos 10 puntos menos que hace cinco años. Entre todos han perdido más de 309.000 votos. Dos tercios de ellos los han perdido los socialistas.