INTERNACIONAL: Israel perpetra una matanza contra la población de Gaza

Tres niños muertos

¿Por qué?. ¿Por qué? ¿Por qué? ¿Qué puede mover a nadie a lanzar muerte y fuego sobre tres pequeños cuerpos, sobre tres brotes de vida fresca, sobre tres promesas de risa? ¿Qué motivos, que negras, hediondas e infernales razones de Estado hay detrás de un ataque tan brutal, de una acción tan criminal, tan obscena, tan abyecta? Cada hora tres niños explotan en Gaza. Cada hora una bomba les arranca la vida. Cada hora se los lleva el fuego y la metralla. Cada hora. Y en el suelo, una madre los llora. Una madre llena de locura, llena de horror. Una madre que se arranca la cara, que lanza alaridos al cielo. Le han arrancado algo más caro que la vida. La han matado aunque siga viviendo.

No es una alegoría, está ocurriendo. No sabemos cómo se llaman los niños, ni cómo se llama la madre. Ojalá lo suiéramos, para poder nombrarlos, para poder velarlos.Pero si sabemos cómo se llaman sus verdugos.No se llaman Abraham ni Moisés, que desde una maquina de muerte y hierro dispararon un misil contra el barrio de Zeitún, contra casas llenas de pasos, llenas de futuro y vida. Ellos –malditos, malditos sean-, sólo son soldados, sólo son esbirros. No. Los asesinos, los genocidas despiadados que envían toneladas de metal y fuego a las entrañas de Gaza no están en el frente, no están en primera línea. No son guerreros heroicos, no son valientes jefes militares que acaudillan a sus tropas al frente de la batalla.No. Son hombres de Estado, de labios apretados y frentes grises, de trajes almidonados y corbatas de seda. Conocen los palacios de mármol y las cloacas del poder. No conocen otro lenguaje que el de la fuerza y las medias mentiras. Dirigen marionetas, aparatos, engranajes, resortes, flechas y lanzas… contra la vida, que late ahí abajo.Se llaman Ehud Olmert, se llaman Tzipi Livni, se llaman Ariel Sharon … -Malditos, malditos sean-.Pero ellos –y lo saben- también son sicarios, también son esbirros, también son engranajes, unidos por un hilo de oro podrido a despachos ovales.Los que han lanzado una lluvia de cuchillas y sangre sobre la niña quebrada que hoy es Gaza son los mismos que aplastaron con sus botas Bagdad, los que derramaron napalm sobre la piel desnuda de My Lai o los que lanzaron un hongo mortal sobre Hiroshima y Nagasaky.Se llaman Donald Rumsfeld, se llaman Dick Cheney, se llaman George W. Bush…-Han sido ellos, han sido ellos. Malditos, malditos sean-.

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