Alarma social: ¿el gobierno reduce la burocracia?

Trabaje usted para el estado

Si en estas áginas hemos venido levantando la “alarma social” ante los casos de corrupción y despilfarro de las diferentes administraciones del estado en tiempos de crisis, ahora nos vemos obligados a levantarla ante un caso de ahorro de dichos gastos.Todos los decretos que aprueben los ministerios deberán cumplir la condición de no generar nuevos trámites burocráticos. Eso supone un ahorro de entre 10 y 15 mil millones de euros (entre 1 y 1,5% del PIB), aprovechando, según la ministra de Administraciones Públicas Elena Salgado, “las posibilidades que ofrece la sociedad de la información para reducir las cargas burocráticas”.Ahí está el problema. Bajo la bandera del ahorro de los gastos del Estado y eliminación de la burocracia, principio del que ningún ciudadano va a renegar, todo lo contrario, se esconde aquello que decía Reagan, que el que el contribuyente trabaje gratis para el estado en condiciones de absoluta indefensión del contribuyente ante la maquinaria (eso sí informatizada) del estado. No desaparecen los trámites burocráticos, desaparece la atención personal que se debe dar a la población ante los problemas que abren los cambios en la legislación. Al estado le sobra burocracia, gastos suntuosos, despilfarrro y corrupción. Pero ahora ya proyectan usar la tecnología de la información para escatimar en atención, y este no es un problema nuevo. Tal como declaró hace unos meses a De Verdad Juan Bautista Segador Escribano, Presidente de la Asociación de Trabajadores de los Centros de la Seguridad Social (ATCAISS), a raíz de la huelga que convocó la asociación contra la falta de personal y la imposibilidad de atender bien a la gente que acudía a tramitar sus papeles, “Nosotros vamos unidos a Tesorería. El día que se transfiriera (a las CCAA) se rompería la caja única de la Seguridad Social y eso no lo quieren hacer. La política de la Administración (de escatimar el personal y su formación) no es de ahora, lleva más de 10 años. Lo que dicen es que como todo está cada vez más informatizado, la tendencia del público es a no ir a las oficinas, sino que Internet les da la posibilidad de hacer las gestiones desde su casa. Pero lo gente no va por ahí. La mayoría de nuestros clientes son pensionistas y a un pensionista no le sientes delante de un ordenador. Él lo que quiere es que le explique sobre su pensión, su revalorización, la carta que le llega. Por mucha informática que haya, el ciudadano quiere una persona que le de una explicación.” Alerta.

Deja una respuesta