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«Recargo de solidaridad». Así llamó la vicepresidenta a la subida del IRPF. Presentándola como un incremento progresivo que no afectará a los de menor renta, y obligará a pagar más a los que más tienen. Perolos números no engañan, y seremos los trabajadores y pequeños ahorradores los que paguemos la gran mayoría de la subida del IRPF, mientras persisten los regalos fiscales a las grandes fortunas, bancos y monopolios.
Dos tercios de la subida de impuestos vendrá del incremento de las cuotas del IRPF, es decir los pagaremos las rentas del trabajo.El ministro de Hacienda, lo ha presentado como un “recargo progresivo”, desde el 0,75% del primer nivel de renta hasta el 7% de subida para quien declare ingresos superiores a los 300.000 euros.Aparentemente, “pagarán más quienes más tienen”. Pero la realidad es muy diferente.Más de la mitad de los declarantes del IRPF son trabajadores que cobran menos de 18.000 euros al año. Y serán estos “mileuristas” los que paguen el 55,3% de la subida. Si ampliamos hasta los 53.400 euros de renta anual -profesionales y pequeños empresarios con ingresos de hasta 3.000 euros mensuales-, son el 84,7% de los declarantes… y van a pagar el 95% del incremento de la recaudación.Los que “más tienen” -el 0,2% de declarantes que cobran más de 300.000 euros anuales- esos que según Rajoy son los que “más iban a pagar”, solo tendrán que abonar… ¡un 0,2% de la subida de impuestos!Valiente “impuesto progresivo” el del Rajoy, donde los que menos tienen pagan más, y los más ricos apenas desembolsan una miseria.Lo mismo ocurre con las llamadas “rentas del capital”, de donde se espera recaudar 1.240 millones de euros más.El 69,6% de ellas son en realidad pequeños y medianos ahorradores con depósitos de hasta 24.000 euros. Ellos -y no los “más ricos”- son los que van a pagar la mayoría de la subida de impuestos a las “rentas del capital”.A lo que hay que sumar los 250 millones de euros de más que Hacienda recaudará al eliminar las subvenciones al gasóleo profesional para transportistas.«Ni uno sólo de los privilegios fiscales que disfrutan los que “más tienen” va a sufrir la subida de impuestos de Rajoy».Las grandes fortunas seguirán tributando un miserable 1% a través de las sicavs. Grandes bancos y monopolios continuarán dejando de pagar casi dos tercios de los impuestos que les corresponde gracias a toda una red de desgravaciones y bonificaciones. Los “más ricos” podrán seguir eludiendo el pago de impuestos a través de un fraude fiscal cifrado en 140.000 millones de euros.Aquí, en los privilegios fiscales de una ínfima minoría, está el grueso del incremento de recaudación que resolvería de un plumazo todo el déficit público.Pero Rajoy nos propone una subida de impuestos, presentada como “progresiva”, donde «los que “más tienen” apenas van a tener de desembolsar 230 millones más… ¡un 3,5% de la subida total de impuestos!» Mientras que al 90% -trabajadores, pymes, profesionales, pequeños ahorradores…- se nos carga con el grueso del ajuste fiscal.