Estamos ante un ataque criminal contra la democracia y la libertad que todos sufrimos más allá de nuestra nacionalidad, raza o religión.
Los autores de este atentado pretenden sembrar el miedo e imponer sus objetivos mediante el terror. No lo conseguirán, porque van a encontrarse con la firme respuesta de todos los pueblos del mundo en defensa de la libertad y la paz.