Lo dijo Sarkozy en el último Consejo Europeo: “Gracias al esfuerzo de Zapatero y al sentido de responsabilidad de Rajoy, España no está en primera línea”. Es posible que las palabras del presidente francés sean sinceras, pero lo que está fuera de toda duda es que son interesadas. Muy interesadas. No en vano, Francia se ha convertido en plena crisis de la deuda soberana en el principal tenedor de deuda pública española. Cerca del 29% de los títulos que ha emitido el Tesoro Público están hoy en manos francesas.