Avances contra el cáncer

Sangre oculta

219.000 casos de cáncer se detectaron en España en 2008. Más del 10% de estos casos se deben al cáncer de colón, que es el más frecuente si sumamos hombres y mujeres. El cáncer de colón es el segundo cáncer más frecuente en ambos sexos en ela mayorí­a de paí­ses desarrollados y la segunda causa de muerte por cáncer.

El rincipal factor que decide la evolución de la enfermedad es el estadío en el momento del dignóstico. De que el tumor esté limitado a la pared del colón o la enfermedad se haya extendido a distancia (metástasis) va una diferencia de más de 80 puntos en la expectativa de supervivencia a los cinco años. Un test de detección de sangre oculta en heces aplicado a la población de más de 50 años podría detectar entre el 30 y el 35 por cien de dichos cánceres. Reducir así las 12.000 muertes anuales que provoca significan unas 3600 personas. La efectividad de esta prueba se basa en que durante un períodod de 5 a 10 años, el cáncer de colon es un pólipo benigno que puede ser extirpado si se le localiza y se considera que tanto los cánceres como sus lesiones precursoras pueden sangrar en algún momento de su evolución.Hasta ahora el cribado por colonoscopia está considerado el mejor método pero sus posibles efectos secundarios y un alto coste económico lo descartan. El test de sangre oculta en heces sería una posible solución. En el XI simposio de Revisiones en Cáncer se ha abierto el debate. El consenso de los expertos es fundamental para conseguir una decisión política que haga realidad la puesta en marcha de esta prueba a escala nacional.La propuesta se basa en la experiencia de Hospitalet de Llobregat, donde se aplicó desde el año 2000 el test a 25 mil personas y se llegaron a detectar 337 casos de cáncer o pólipo.Existe un alto grado de cnsenso entre los profesionales sanitarios sobre la necesidad de instaurar programs de cribado del cáncer de colón. Es urgente el desarrollo de tests que sean muy sensibles, específicos y fáciles de aplicar. La mayoría de las muertes por cáncer colorrectal pueden prevenirse y existe un elevado grado de consenso sobre la necesidad de instaurar programas de cribado del CCR en la población de riesgo intermedio. Está por definir cuál es la estrategia más eficiente, para lo cual será fundamental el desarrollo de test de alta sensibilidad, especificidad y fácil aplicación. Es un ejemplo de que la prevención y el diagnóstico precoz del cáncer tienen que ser una prioridad para los responsables sanitarios.

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