¿Sabí­as que ni Botí­n ni Apple pagan sus impuestos?

Botí­n y diez miembros de su familia no se sentarán en el banquillo por la evasión de impuestos de su cuenta secreta en Suiza, con más de 2.000 millones de euros, durante décadas. Al mismo tiempo nos enteramos que a la empresa de los ordenadores de la manzanita, Apple, no pagará impuestos en España, porque el Impuesto de Sociedades le sale a devolver. Hacienda es un auténtico agujero negro donde quien más tiene menos paga.

La Audiencia Nacional acaba de consumar el perdón a Botín y familia archivando el caso. Al principal banquero del país, más de 70 años ocultando dinero y evadiendo impuestos en Suiza apenas le ha “costado” pagar 200 millones de euros por los últimos cinco años y ningún coste penal. A Botín ni se le juzga ni se le investiga, ya que se archiva el caso a pesar, como han denunciado inspectores de Hacienda, de que no se sabe con certeza cuanto es lo defraudado ni muchas cosas sobre la cuenta de Suiza; ya que no se ha “podido” contrastar la información con la base de datos de la AEAT. «Si banqueros y monopolios pagaran los impuestos que les toca, no habría necesidad de hacer recorte alguno»

Apple, por su parte, a pesar de haber multiplicado sus ingresos por 14 en 2011 -se le calculan unas ventas de 1.775 millones de euros en 2011- presenta una declaración del Impuesto de Sociedades a devolver, por lo que no pagará impuestos en España.

¿Mientras se persigue con ensañamiento a pymes y autónomos, cuánto dinero dejan de pagar bancos, multinacionales y grandes fortunas en impuestos? ¿Cómo se puede seguir manteniendo un sistema de privilegios fiscales para que quien más tiene y más beneficios saca menos paga? ¿O una justicia implacable con los desahucios pero que siempre encuentra la absolución para los banqueros?

Estudios de los técnicos de Hacienda cifran en más de 70.000 millones de euros lo que se podría recaudar cambiando las leyes para perseguir a los grandes defraudadores, y acabar con los privilegios fiscales de las grandes fortunas, bancos, monopolios y multinacionales.Y muchos más que se podrían añadir con una auténtica reforma fiscal progresiva, para que pague más quien más tiene, del impuesto sobre la renta, las SICAV, el Impuesto de Sociedades y de Patrimonio.

Se acabaría con el déficit sin necesidad de recortes.