Cargando...Ya sucedió en las pasadas elecciones generales de marzo de 2008. Hubo un serio esfuerzo mediático por colocar a Rosa Díez, y a Unión, Progreso y Democracia (UPyD) junto al PP. Incluso situarla más a la derecha que la línea de Rajoy, y en connivencia con los llamados «sectores más duros» del PP. Y el objetivo de situar a Rosa Díez y a UPyD a la derecha, incluso a la derecha «más rancia» no ha desaparecido desde entonces. Ha continuado durante todos estos meses.
Pero, ¡ay, señores!, llegan las elecciones vascas y gallegas. Son una esecie de elecciones «generales» parciales, y previas a las europeas. Y todos nos jugamos mucho. Así que hace falta lanzar una campaña a tope: «Rosa Díez igual que Rajoy, pero más a la derecha», «UPyD igual que el PP pero más rancio». Hay que construir un muro de propaganda, en todos los medios de comunicación posibles, alrededor de los posibles votantes de UPyD provenientes de una mentalidad de izquierda. ¿Quiénes temen, de verdad, a Rosa Díez y a UPyD? Aquellos que llevan años traicionando la larga tradición democrática, progresista y patriótica de los españoles con una trayectoria de izquierda. Porque Rosa Díez ni ha renunciado a su historia socialista ni ha traicionado las bellas tradiciones de nuestro pueblo ni las verdaderas posiciones socialistas. Porque UPyD mantiene unas ideas políticas de profundo calado democrático, con importantes demandas progresistas y con una defensa patriótica de España, de su unidad y de su fortaleza. Y esta alternativa de Rosa Díez y de UPyD es acogida como agua de mayo en este invierno político, frío y seco. Y quienes más y mejor absorben el mensaje son las gentes de izquierda, deseosas de que cambie esta situación de falsedad y de engaño. Evidentemente, hay un sector de ciudadanos con mentalidad liberal que han podido votar al PP; que, ahora, son conscientes de la obvia falsedad de Rajoy en su defensa de la unidad y la fortaleza de España; que ven su apoyo a los barones autonómicos del PP y a las castas burocráticas locales; ciudadanos que, por ello, pueden plantearse votar a UPyD. Pero, como bien saben el estado mayor, o los estados mayores, existentes detrás del PSOE y del gobierno de Zapatero, porque estudian mucho, existen sectores de ciudadanos, cada vez más numerosos, cada vez más animados, cada vez más dispuestos a cambiar de voto, o a volver a votar. Sectores de ciudadanos que se identifican con una tradición de izquierda en España, hartos de la falsedad recubierta de palabras de izquierda, asqueados de los engaños justificados con razones de «izquierda».Como en las elecciones generales pasadas, la mayoría de los votantes vendrán de zonas donde el PSOE (y de IU también) perderá muchos votos. Y ellos lo saben. Por eso temen tanto a Rosa Díez y a UPyD. Por eso quieren engañar y confundir a los electores.