Un nuevo golpe para la comarca de Puertollano (Ciudad Real): el pasado 16 de junio las eléctricas decidieron cerrar la planta de Elcogas (fundada en 1992) en Puertollano tras perder, afirman,150 millones de euros. En dicha planta trabajan unas 300 personas, 144 de plantilla de Elcogas y más de 150 de empresas auxiliares como Masa, Eulen, Felguera, FJ Dosan, Flexiplan, además de empresas que tienen contratados los servicios de ingeniería a Elcogas, entre otras.
La planta llevaba sin producir desde que comenzó el año debido a que Red Eléctrica de España (REE), la compañía encargada del transporte eléctrico en el país, se abasteció durante ese tiempo principalmente de la electricidad procedente de renovables, sobre todo eólica e hidroeléctrica debido a la situación meteorológica imperante a lo largo del pasado invierno.
Empezó a ponerse en marcha hace unas semanas. La central había sido «rescatada» por sus principales accionistas, Endesa, Electricité de France e Iberdrola.
El dinero del último rescate le fue prestado por un grupo de entidades bancarias con las garantías de los principales socios, tres de las mayores eléctricas de España y Europa. Endesa, como EDF e Iberdrola, le había dado créditos participativos y garantías para reemplazar a la financiación bancaria. La primera tiene el 41% del capital; la segunda, cerca del 30% y la eléctrica dirigida por Ignacio Sánchez Galán, Iberdrola, alrededor del 12%. Hidrocantábrico, EDP y Siemens también cuentan con pequeñas participaciones).
Sin embargo, los representantes sindicales hace meses ya advirtieron que de no cambiar la regulación eléctrica del gobierno la planta no pasaría de mitad de año, como así ha sido. La empresa afirma ahora que no genera dinero suficiente para pagar los 127 millones que adeuda a corto plazo, a los que hay que sumar la deuda prevista de unos 18 millones de eueros este año.
Dicha regulación eléctrica fija el próximo 31 de diciembre de este año la finalización del Real Decreto de restricciones por garantía de suministro, mediante el cual se prima a las centrales térmicas que quemen carbón nacional, tal y como fijó el Plan Nacional del Carbón 2006-2012.
En definitiva, la planta une su destino al carbón nacional.
Con pancartas colocadas en las vallas, reivindicaciones en la hora del bocadillo y acciones de este índole los trabajadores han venido rechazando el cierre de Elcogas y no quieren oir hablar de otra cosa que no sea el mantenimiento de la actividad en esta central.
Tanto los trabajadores de la central térmica como de empresas auxiliares se sumarán así a las acciones emprendidas por los sindicatos CCOO y FITAG-UGT para presionar a la administración y revertir la decisión de los accionistas de cerrar Elcogas. La fecha es el martes día 10 de julio.
Solaria
La comarca de Puertollano también ha sufrido el cierre de una planta de Solaria, la empresa de energías renovables que atraviesa una difícil situación financiera. Allí trabajaban 213 personas.
Desde febrero, ante el anuncio del cierre de Solaria, se suceden las manifestaciones en Puertollano “por la industria, por el empleo, por el futuro”.
Hasta ahora la industria en Puertollano estaba siendo impulsada sobre todo gracias en a los fondos Miner y a la atracción de empresas enfocadas a las energías renovables.
De los 22.000 millones de dinero público que, según Industria ha recibido el sector desde 1990 en toda España, la gran mayoría ha ido a las empresas mineras y a prejubilaciones. Pero además, y para paliar el declive, el plan del carbón 2006-2012 financió “la transición de las comarcas mineras hacia actividades económicas de mayor valor añadido y de mayor calidad de los recursos humanos”. Para ello anunció que habría 250 millones al año en infraestructuras (que incluían nuevos polígonos industriales) y 150 millones para proyectos empresariales. El resultado es que se han esfumado los millones y de reconversión nada.
Ahora, de las 7.455 personas desempleadas en la comarca de Puertollano, más del 75% pertenecen al sector industrial.
Las renovables como alternativa han sufrido también un frenazo en toda regla.
Solaria Energía y Medio Ambiente, S.A, una empresa dedicada a las energías renovables, uno de los principales productores de módulos solares tanto térmicos como para la producción de energía eléctrica en España. Es una de las empresas líderes en el sector de las energía renovables, uno de los mayores fabricantes de módulos fotovoltaicos y térmicos a nivel internacional, y la primera y única empresa solar que cotiza en la Bolsa Española.
La empresa ha justificado el cierre alegando “causas productivas”, afirmando que este proceso “no es viable ni en España ni en Europa” por lo que les han dicho que “si mañana hay que abrir una fábrica en Uruguay o en cualquier otro lugar, porque las circunstancias así lo requieran, se abrirá”.
Sin embargo, el presidente del comité de empresas tiene suspicacias al respecto después de haber leído en la web de la empresa “que han culminado con éxito las negociaciones para el desarrollo y venta al Reino Unido de dos proyectos de 2,9 y 1,8 megas”. Además, El Consejo de Administración de la empresa de energía fotovoltaica Solaria ha lanzado una ampliación de capital de 5,6 millones de euros, que ha sido suscrita por Société Générale (Francia).
Parece que la falta de proyecto energético propio atrae la inversión extranjera. Desde un proyecto de independencia energética para nuestro país hay que cuestionar los cierres, cuyo eje común es la aceptación de las directrices para acabar con el carbón nacional sin dar una alternativa en el sector de renovables, ni en ningún otro.