SELECCIÓN DE PRENSA NACIONAL

Pregunta inocente: ¿Conocí­a don Juan Carlos las correrí­as de doña Cristina y su marido?

Si tanta prisa corría garantizar que don Juan Carlos quedara en manos del Supremo y no de un juzgado ordinario, en caso de ser encausado, el Gobierno podría haber estirado un poco la ley orgánica que aprobó el 3 de junio para dar cobertura legal a su abdicación e incluir en ella su inviolabilidad. No lo hizo y, a pesar de ello, la norma ni siquiera obtuvo la unanimidad del Congreso cuando fue sometida a debate una semana después.

Justo a los 22 días de que el Rey saliente sorprendiera con el anuncio de su retirada, la comisión de Justicia ha aprobado el aforamiento civil y penal no solo de don Juan Carlos, sino también de la reina Sofía, la reina Letizia y la infanta Leonor. Si la intención del Gobierno era evitar legislar en caliente para apagar el ruido, solo lo ha conseguido a medias: el procedimiento elegido, dos enmiendas veloces encajadas en sendas leyes ajenas al asunto, ha provocado asombro a buena parte de los letrados de la Cámara Alta y estupor al conjunto de la oposición. Su rechazo volverá a tener eco en el pleno de mañana jueves y durante el trámite pendiente en el Senado para dentro de dos semanas. Solo los parlamentarios de Izquierda Unida y el Grupo Mixto se han atrevido a decir lo que piensan de verdad. Los del PP y los del PSOE solo murmuran en voz baja su sospecha: a don Juan Carlos le ha entrado el pánico a que cualquier ciudadano encauce por vía judicial alguna pregunta inocente.

Por ejemplo, ésta: ¿Conocía el anterior monarca algo de lo que el juez Castro detallará hoy en su auto sobre las correrías de doña Cristina y su marido? ¡Uff…! Deprisa, deprisa, responden quienes respaldan su rápido aforamiento.

Deja una respuesta