Portugal, de vuelta a casa

Portugal se propone que sus jóvenes cualificados emigrados vuelvan al país para emprender

En 2015 la situación demográfica de Portugal era más que sangrante. Había más de 2.3 millones de portugueses (más del 20 % de la población) viviendo fuera de su país, más que nunca en toda su historia. Comparado con España sería el equivalente a que toda la población de Andalucía y Extremadura junta viviese en el extranjero. El país se desangraba demográficamente.

La intervención de la Troika en 2011 tuvo mucho que ver con esta sangría: las medidas de recortes supusieron un descenso tan agudo en las condiciones de vida y trabajo en el país que entre 2010 y 2015 más de 200.000 portugueses probaran fortuna hacia destinos como Reino Unido, Alemania, Francia y Suiza.

La mayoría de los emigrados, un 70%, quiere regresar a Portugal según un estudio lanzado por la Asociación Empresarial de Portugal. El problema era cómo crear las condiciones para hacer laboralmente atractivo el país. La solución al problema empezó a plantearse con el cambio de gobierno en 2015.

Emigrantes, ¡volved!

Una de las primeras prioridades del nuevo gobierno socialista salido de las elecciones de 2015 fue recuperar lo que la austeridad se llevó. Así, empresarios y gobierno han juntado esfuerzos a nivel de todo el Estado para atraer a los jóvenes de vuelta.

En 2016 la Asociación Empresarial de Portugal impulsaría el plan Emprender2020, el regreso de una generación preparada. La agencia pública buscaba identificar y preparar condiciones para que los jóvenes emigrados con intención de emprender pudieran hacerlo en Portugal, reuniendo a estudiantes, universidades, profesores, empresarios e instituciones diversas, públicas y privadas.

Los objetivos del plan son, entre otros: la realización de un listado exhaustivo de los jóvenes emigrados poseedores de altas competencias, técnicas y educativas; la divulgación de oportunidades de emprendimiento cualificado y creativo y el refuerzo de la relación empresarial en la diáspora; la creación de una red internacional de información y soporte a estos emprendedores o el desarrollo de un programa de apoyo a los empresarios que se encuentran dispersos en diversas geografías.

Una vez echado a andar, el proyecto se vio reforzado desde junio de 2017, cuando desde el gobierno se cedió la red consular y diplomática para, según el ministro de Negocios Extranjeros Augusto Santos Silva: “ayudar en la identificación de jóvenes, en la simplificación de los circuitos burocráticos, en la identificación de oportunidades y la canalización de financiación”.

La emigración en Portugal ha descendido, particularmente desde 2016. La AEP ha realizado ya 1100 entrevistas que significan un buen comienzo y un ejemplo que no tiene punto de comparación con la forma en que el gobierno de Rajoy ha gestionado un problema que también nos afecta severamente, especialmente en el ámbito de la investigación científica.

Deja una respuesta