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La penicilina fue descubierta por el bacteriólogo Alexander Fleming. La penicilina es un antibiótico que revolucionó la medicina moderna, permitió tratar enfermedades que a principios de siglo eran incurables como la sífilis o la tuberculosis que afectaban igualmente a ricos y pobres.
La enicilina inició la era de los antibióticos. Fleming no descubrió la penicilina accidentalmente. Las propiedades de los hongos eran ya conocidas por otras civilizaciones antiguas. Es una sustancia inocua para las células del organismo y letal para las bacterias. En un principio el descubrimiento no tuvo demasiado eco, pasaron 15 años hasta que se extendió su uso. Era todavía una sustancia muy inestable, las técnicas químicas hacían su depuración muy difícil. El patólogo australiano H. W. Florey y el químico alemán E. B. Chain consiguieron sintetizar la sustancia y generalizar su uso. Se empezó a comercializar en la década de los 40. Durante la segunda guerra mundial se mejoraron las técnicas de fermentación del hongo Hoy incluso se tratan enfermedades con penicilinas sintéticas. Hoy el mal uso del antibiótico ha hecho que algunas bacterias sean resistentes a ella .“El tiempo vendrá cuando la penicilina pueda ser comprada por cualquiera en las tiendas. Y luego está el peligro de que el hombre ignorante use a menudo infradosis y, al exponer a sus microbios a cantidades no-letales de la droga, los vuelva resistentes”. Alexander Fleming