Entrevista a Sara Montero

Entrevistamos a Sara Montero, cabeza de lista de la coalición Recortes Cero – Partido Castellano – Tierra Comunera – Grupo Verde – Municipalistas para las elecciones del 4 de mayo en Madrid, después de una larga jornada. Por la mañana ha trabajado de cartera –«los contratados externos de Correos no nos podemos pedir excedencia», se ríe- y por la tarde se ha puesto el traje de candidata y ha estado en varios actos de campaña. Y aún dice que después de la entrevista tiene una reunión.

¿Cuántos años tienes?

Treinta y ocho

Estás en un partido desde hace ¿cuánto tiempo?

Desde hace veinte años. Me organicé en Unificación Comunista de España a los dieciocho, en una huelga de la FNAC.

¿Y qué formación tienes?

Soy licenciada en comunicación audiovisual, soy periodista

¿De qué trabajas?

Tengo dos empleos. Soy trabajadora de Correos, además de periodista. Por la mañana soy cartera, por las tardes impulso un proyecto de medios independientes, el De Verdad Televisión.

Como cartera eres trabajadora esencial. Has estado en contacto directo, durante todos estos meses de pandemia, con la gente. ¿Qué impresiones sacas de cómo vive la gente esta difícil situación?

Los trabajadores de Correos hemos estado trabajando durante el Estado de Alarma, puerta a puerta. En aquellos primeros meses pude ver con mis ojos la ola de solidaridad entre los vecinos, donde había un punto casi mágico donde te preocupabas por gente que era desconocida. Y ahora, cada día compruebas con tu trabajo que en cada bloque de vecinos hay gente que lo está pasando muy mal. Vas conociendo a los vecinos y te das cuenta que el empobrecimiento se está generalizando.

¿Cómo lo notas?

Se nota. Además del trato personal con los vecinos -porque al final un cartero es una figura cotidiana, como el panadero, a la que la gente le coge confianza- nosotros repartimos todas las notificaciones del SEPE sobre las ayudas de los ERTES o el Ingreso Mínimo. Ves la reacción de la gente al darle la carta certificada, de angustia o de alivio. Percibes la situación por la que están pasando los barrios populares. Y no es algo que esté concentrado en unos pocos barrios, es algo cada vez más general entre los madrileños.

También impulsas un proyecto audiovisual de medios de comunicación independientes.

Sí, mi proyecto como periodista es crear medios de comunicación independientes que puedan contar la realidad desde otra posición y otro punto de vista. La información y la comunicación es fundamental para que la gente tenga una opinión formada y contrastada, y por tanto tenga capacidad crítica y transformadora de su situación, para que pueda decidir libremente.

Redistribuir la enorme riqueza que tiene Madrid depende en primer lugar de querer. De tener voluntad política para conquistarlo. Nosotros la tenemos.

La pluralidad y la independencia informativa es un principio democrático con el que el periodista debe comprometerse, y por eso promover medios independientes me parece esencial. Porque lo que estamos viviendo es una concentración brutal en los medios, donde tres o cuatro grupos controlan enormes conglomerados de televisiones, radios o periódicos. Y eso se está agravando fruto de la crisis económica, donde menguan los ingresos por publicidad. Muchos medios están quebrando y quedan, o son absorbidos, los más grandes.

Te lo pregunto directamente. ¿Por qué la gente debería votar a Recortes Cero-PCAS-TC-Grupo Verde-Municipalistas y por qué no a otras opciones de izquierdas?

Porque nuestra coalición es la única que lleva como centro la Redistribución de la Riqueza. Y en una situación de crisis y saqueo como la actual, ésta es la alternativa principal de la que depende el futuro de la mayoría. Es la única alternativa para salir de esta crisis más fuertes, en beneficio de los trabajadores.

Si no se coge firmemente la redistribución de la riqueza, la otra opción son los recortes. Yo creo que no lo admiten, pero se ha asumido desde otras candidaturas, incluso de izquierdas, que inevitablemente se tendrán que hacer recortes y ajustes. Y nosotros no lo aceptamos. Ni uno más. Otras alternativas no tienen en su pensamiento redistribuir la riqueza para crear nueva riqueza, para reindustrializar.

Madrid es la comunidad más rica de España, y también la más desigual. Tenemos todos los recursos, si se redistribuye la enorme riqueza de nuestra comunidad, para convertir Madrid en una capital para la reconstrucción económica, elevando las condiciones de vida de la mayoría, subiendo salarios y pensiones y potenciando sanidad o educación. Pero para eso hay que poner coto a los sueldazos de los ejecutivos del Ibex, a las ganancias de los bancos o de los fondos buitre.

Eso depende en primer lugar de querer. De tener voluntad política para conquistarlo. Nosotros la tenemos.

¿Qué les dirías a los que siempre hablan del voto útil y de que no hay que dispersar a la izquierda?

Bueno, lo útil en esta situación es una alternativa que tenga capacidad para dar una salida a la crisis. Lo útil es una alternativa que una, y en España hemos tenido que repetir elecciones porque las fuerzas progresistas ni eran capaces de ponerse de acuerdo para gobernar, mientras que nosotros les animábamos a hacerlo, con manifiestos como los de «Gobierno de Progreso». Y lo mismo ha pasado en Madrid.

No veo que eso sea una política muy «útil». Si no son capaces de ponerse de acuerdo en cosas fundamentales, como las cuestiones de la pandemia, no son útiles. Esta es una campaña “a la contra” donde sobre todo se habla en contra del adversario, pero no se habla del propio programa. Si no tienen una alternativa verdaderamente diferente para el país y para la gente, que puedan convertir las colas del hambre en colas de empleo, su propuesta no es útil.

Otras candidaturas, incluso de izquierdas, aceptan inevitablemente se tendrán que hacer recortes y ajustes. Y nosotros no lo aceptamos. Ni uno más.

Y luego, con el argumento del voto útil, te tienen chantajeado. Con ese punto de vista no habría nacido Podemos, ni tampoco Más Madrid. Ni tampoco fuerzas como Teruel Existe. Lo útil es que lo que es justo se abra paso a contracorriente.

¿No te preocupa que Ayuso y la ultraderecha gobiernen Madrid?

Claro que me preocupa, porque son los que quieren aplicar recortes sin complejos. Pero el verdadero problema son los recortes y el empobrecimiento que quieren imponernos los bancos y los monopolios, o los grandes centros de decisión de Washington y Bruselas. Ayuso y Monasterio son solo sus representantes.

Hay que parar los pies a la derecha y la ultraderecha, pero ese no es todo el problema, sino parar la crisis económica que quieren descargar sobre el 90%. No se puede pensar solo en el día después del 4M y quién gobernará Madrid los próximos cuatro años, sino en el medio y el largo plazo, en qué condiciones de vida y trabajo quieren imponer a la mayoría para los próximos cinco años. Por ejemplo, la Comisión Europea diciendo que hay que reformar las pensiones, o profundizar en la reforma laboral.

¿Cuáles son las tres primeras medidas o propuestas que lanzaríais si vuestra coalición llegara a la Asamblea de Madrid?

En primer lugar queremos impulsar un Plan Integral, que dé una respuesta conjunta tanto a la crisis sanitaria como a la crisis económica y social que vive la gente.

En cuanto a la sanidad, lo primero es revertir los recortes en Sanidad de los últimos años y recuperar la inversión, los más de mil profesionales, las tres mil camas, que se han perdido, que han sido despedidos. Hay que fortalecer la Atención Primaria y los centros de salud. Hay que acabar con la privatización abierta y encubierta con las «externalizaciones», y destinar 450 millones de euros para igualar la inversión sanitaria de Madrid con la del resto de España. Y al mismo tiempo que se acaban los copagos, revisar el gasto farmacéutico que beneficia a las grandes empresas.

En cuanto a la economía, hay que atender a miles de pymes y autónomos a los que las medidas sanitarias les obligan a cerrar o a trabajar con restricciones, pero no se les da ayudas ni alternativas. Desde las políticas redistributivas, proponemos crear un fondo de 5.000 millones para rescatar a esos sectores productivos. Y hay que fortalecer los servicios públicos para que lleguen con rapidez las ayudas o el IMV.

Una izquierda sin complejos tiene que contestar a la Comisión Europea y decir que no aceptamos ayudas a cambio de recortes, ni de imposiciones

Lo segundo que haríamos sería lanzar en la Asamblea de Madrid una moción para instar a gobierno y el Congreso a blindar las pensiones en la Constitución, prohibiendo que se recorten o privaticen. Un blindaje que nos proteja de las intenciones de la Comisión Europea, que pone como condición a darnos los fondos de reconstrucción una reforma de las pensiones, que nos cuela los fondos privados de empresa.

En tercer lugar, impulsaríamos una redistribución salarial, empezando por la administración autonómica. Que ningún funcionario, ni trabajador público, ni de empresa que tenga contratos con la CAM, cobre menos de 1.000 euros al mes. Sobre la base de que ningún alto cargo, ni consejero, ni asesor, ni directivo de empresa que tenga concursos con la administración, cobre más de 5.000 euros al mes.

Un techo salarial para garantizar un suelo de mil euros. Subir sueldos y pensiones para la mayoría, para activar la economía, para estimular el consumo del que se benefician las pymes y los autónomos.

Pablo Iglesias reivindica una izquierda “sin complejos” para vencer en Madrid. ¿Qué es para tí una izquierda sin complejos?

Lo que la izquierda debe defender sin complejos es imponer topes salariales a los grandes directivos de las grandes empresas. O subir los impuestos a los bancos y grandes capitales que operan en la Comunidad de Madrid, que están declarando beneficios millonarios en medio de la pandemia, y que gracias al PP tienen en Madrid un paraíso fiscal. No tener complejos es obligarles a devolver el rescate de la banca del que nadie habla ya, 65.000 millones públicos que se dan por perdidos. No tener complejos es realizar una auditoría pública y exhaustiva de la deuda de las administraciones públicas, para empezar de la de la CAM y de los ayuntamientos, para ver dónde hay una parte ilegítima y que no debe ser pagada. O imponer una moratoria en el pago de los intereses hasta que la economía no crezca por encima del 3% y el paro baje del 10%.

Una izquierda sin complejos tiene que contestar a la Comisión Europea y decir que no aceptamos ayudas a cambio de recortes, ni de imposiciones. Que no aceptamos los fondos a cambio de una reforma privatizadora de las pensiones ni de una nueva vuelta de tuerca en la reforma laboral. Eso no se lo he escuchado a Pablo Iglesias, ni como vicepresidente, ni como candidato. Tampoco a Más Madrid, ni por supuesto al PSOE.

Durante la pandemia, Recortes Cero habéis lanzado hasta seis manifiestos llamando a la «Unidad y la Solidaridad». ¿Puedes explicar qué es esto del Frente Amplio de Unidad?

Siempre hemos dicho que, particularmente en una situación de alerta sanitaria, de crisis, la unidad es fundamental. La unidad entre las distintas nacionalidades y regiones de España. No puede ser que Madrid, por la dirección de Ayuso, vaya permanentemente a la contra de lo que acuerdan los demás. El enfrentamiento, la polarización y la bronca política, especialmente en la Comunidad de Madrid, es irrespirable. Madrid debe ser ejemplo de promover la unidad, pero Ayuso parece tener como único objetivo el enfrentamiento con el gobierno central, poniéndose a la contra del resto de CCAA, incluso de las gobernadas por su partido. Eso nos hace más débiles frente al virus.

Por encima de las diferencias ideológicas o de programa, la unidad es fundamental para un país y más en esta situación, donde debe haber un mensaje consensuado en cuanto a medidas sanitarias.

¿Cómo habéis plasmado en esta coalición esta voluntad de trabajar por la unidad?

En esta candidatura participan casi 30 organizaciones sociales y políticas, de distintas sensibilidades, trayectorias y tradiciones de lucha. Somos Recortes Cero, Partido Castellano-Tierra Comunera, Grupo Verde y Municipalistas. Somos la única candidatura unitaria que se ha presentado cuando otros intentos de aglutinación han fracasado. Hemos querido expresar en nuestra coalición esa forma de hacer política integrando, sumando y uniendo a los diferentes, en torno a un programa y un proyecto común basado en la redistribución de la riqueza. Esta es nuestra forma de trabajar y de hacer política.