Botín ha vuelto a hablar y ha puesto las cosas en su sitio. Nos enfrentamos a una oleada de recortes sociales y rebajas salariales que van a decidir nuestro futuro durante mucho tiempo. Al día siguiente de que las movilizaciones contra el «pensionazo», algunos medios «aconsejaban» al gobierno aparcar el recorte de las pensiones, dado el grado de rechazo social que suscita, para centrarse en «otras reformas más necesarias», como la reforma laboral. La respuesta del dueño del Banco de Santander fue fulminante, «instando» -cabe decir ordenando- al gobierno «a poner en marcha cuanto antes las reformas anunciadas sobre el sistema de pensiones y el mercado laboral». Es la segunda vez que el padrino de la oligarquía se ve obligado a defender públicamente el recorte de las pensiones, fijando las «líneas rojas» de la gran banca. Lo necesitan todo, y lo quieren ya.
La banca esañola tiene que devolver 800.000 millones de euros al capital extranjero, y un tercio de esa ingente cantidad debe abonarse en los próximos dos años.Ellos se endeudaron con el exterior para financiar su expansión internacional… y ahora quieren que nosotros paguemos sus deudas.Este es el corazón de la política de Zapatero: cargarnos, a través de un draconiano plan de recortes sociales, la factura de las deudas de la banca.Para ello, están dispuestos a recortar las pensiones entre un 10% y un 30%, rebajarnos el salario un 25% o a dar un tijeretazo sin precedentes a los gastos sociales.Esto es lo que nos preparan, aunque los grandes medios pretendan ocultarlo. La aparición pública de Botín, acuciado por la necesidad, tiene la virtud de desvelar la magnitud de lo que nos estamos jugando.Hay momentos en la vida de un país en los que se está decidiendo el futuro durante largo tiempo. Hoy es uno de ellos. Si Botín y Zapatero son capaces de aplicar su plan de “ajuste duro”, las condiciones de vida y trabajo del pueblo trabajador van a descender drásticamente.Quieren que seamos como mínimo un 30% más pobres, y al menos durante diez años, para que el Santander pueda seguir siendo el primer banco de la zona euro.Esto es lo que nos estamos jugando: como vamos a vivir nosotros y nuestros hijos.Hablan de la bondad de “un pacto entre todas las fuerzas políticas y sociales para hacer frente a la crisis”, pero ocultan que el contenido de “su pacto” es crear las mejores condiciones para imponernos a todos nosotros sus recortes.Los medios de comunicación, monopolizados y controlados por la gran banca, pretenden anestesiar nuestras conciencias, ocultando lo que se nos viene encima.Pero tenemos que ser conscientes de que nos estamos jugando nuestro futuro.Por eso todos los voceros de la banca -se disfracen de “derechas” o de “izquierdas”- se han lanzado a vilipendiar las movilizaciones. Necesitan imponer su plan de recortes, y saben que uno de los principales obstáculos es el grado de movilización popular.Todos tenemos que ser conscientes de lo que nos estamos jugando. Y actuar en consecuencia.Ellos, los Botín y Zapatero, van a poner todas sus fuerzas en tensión para hacernos tragar con su ajuste duro. Nosotros, el pueblo trabajador, debemos hacer lo mismo.Nos estamos jugando nuestro futuro