Cargando...México está al borde de un abismo que se llama narco-Estado
El ex zar antidroga mexicano, Noé Ramírez Mandujano, fue enviado hoy, tras haber ermanecido 80 días en detención preventiva, a una prisión en espera de que un juez determine si lo procesa por su presunta colaboración con el crimen organizado.La Procuraduría General de la República (PGR, Fiscalía) denunció en noviembre pasado que Ramírez Mandujano, que ocupó ese cargo policial de diciembre de 2006 a julio de 2008, recibía mensualmente 450.000 dólares de los hermanos Beltrán Leyva, antes aliados del cartel de Sinaloa y ahora del cartel del Golfo.Ramírez Mandujano fue detenido en el marco de la «Operación Limpieza», que realiza la Fiscalía general entre las filas de las instituciones encargadas de combatir al narcotráfico y que han sido infiltradas.Por esa operación han sido detenidos una docena de altos mandos y agentes policiales, entre otros el ex director de la Policía Federal Preventiva (PFP) Gerardo Garay y dos ex jefes de la Interpol México.Paralelamente, las autoridades federales llevan a cabo una purga de las policías municipales y estatales, muchas de las cuales se cree que fueron infiltradas por el narcotráfico para que les permitieran el paso de convoyes con droga hacia Estados UnidosMéxico está al borde de un abismo que se llama narco-Estado y si el gobierno encabezado por Barack Obama no respalda la estrategia antidrogas del presidente Felipe Calderón, en menos de ocho años el crimen organizado tendrá el control de facto en amplias franjas del país y pondrá en riesgo la seguridad nacional de Estados Unidos, advierte Barry McCaffrey, ex zar antidrogas de Washington en el gobierno de Clinton. «No podemos darnos el lujo de tener un vecino así», puntualiza.McCaffrey resume el sombrío panorama así: «El Estado mexicano está involucrado en una lucha interna cada vez más violenta contra los cárteles narcocriminales pesadamente armados, que han intimidado al público, corrompido a una gran parte de las fuerzas de la ley y creado un ambiente de impunidad ante la ley. Miles están siendo asesinados todos los años. La lucha por el poder entre los cárteles de la droga ha resultado en el caos en los estados y ciudades mexicanos a lo largo de la frontera México-EU. Los asesinatos y secuestros relacionados con las drogas son ahora sucesos comunes en todo el país».México parece ser ya un candidato al colapso. En el informe de 2008, el Comando Conjunto advierte que México vive amenazado: «El gobierno, sus políticos, la policía y la infraestructura judicial están, todos, bajo asalto y presionados de manera sostenida por bandas criminales y cárteles de la droga». Esta tormenta perfecta de factores de riesgo podría convertir a México en una posibilidad de «colapso repentino».La conclusión del informe de las fuerzas armadas es contundente: México podría convertirse en un Estado fallido.