Cargando...Las ausencias de los mandatarios de Egipto y Nigeria, dos de los pesos pesados del continente y próximos a las directrices imperialistas, junto a otros como Argelia o Sudáfrica, han mostrado serias reticencias, cobran especial importancia en una cumbre que debe abordar hasta el próximo viernes la aceleración del proyecto de gobierno africano impulsado por el líder libio, Muamar el Gadafi.
Partició como orador invitado el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, en lo que representó la primera vez que un jefe de Estado de este país interviene en una cumbre africana. "Es tiempo para que Brasil y África pongan en marcha nuevas normas de cooperación económica sin la intervención extranjera", dijo y destacó que el continente africano es una de las prioridades de su política exterior.Gadafi hizo un llamamiento a los países del Caribe a adherirse a la UA ya que sus poblaciones "son mayoritariamente africanas" y pueden representar "un puente para reforzar la cooperación entre África y Latinoamérica".Aicha Rous, representante del secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, destacó que la crisis económica mundial tiene un "impacto especial" sobre el continente debido al aumento de los precios de los productos alimenticios y de la energía y subrayó la importancia de la inversión en agricultura para garantizar la seguridad alimentaria. Lula se presto en colaborar con los países africanos para llevar adelante su "Revolución verde", exhortando a que brasil y África "escriban juntos su historia y su porvenir común".Lula anunció que Brasil está organizando una reunión de los ministros africanos de Agricultura para que los países del continente se beneficien de la experiencia brasileña en el sector agrícola,. Asimismo, destacó que desde su llegada al poder ha visitado 20 países africanos y se ha incrementado considerablemente la representación diplomática brasileña en el continente hasta llegar a 34 embajadas, la mayor presencia en comparación con el resto de países del mundo.En la primera intervención de un jefe de Estado brasileño como orador invitado en una cumbre africana se hicieron las propuestas de "es tiempo para que Brasil y África pongan en marcha nuevas normas de cooperación económica sin la intervención extranjera"."Hay un proverbio que dice que si no quieres que los demás escriban por ti, escribe tu mismo tu historia. Brasil y África deben escribir juntos su historia y su porvenir común".La Revolución verde, que defiende Lula considera que "no debe hacerse sin la agricultura familiar, y que debe crear empleos", completamente opuesta a la “Revolución Verde” de las transnacionales de la alimentación y la del imperalismo. La intervención de Lula se puede describir dentro de un marco de la apología de la independencia y autonomía de gestión. "Brasil no ha venido a África para disculparse del pasado colonial, nosotros queremos ser verdaderos socios en el desarrollo y la cooperación", dijo Lula y recalcó que "juntos podemos hacer grandes cosas para desarrollar nuestras economías". "Nosotros tenemos con África retos de desarrollo similares", dijo Lula, citando la lucha contra el hambre y la pobreza y el suministro suficiente de alimentos a la población.En otro sentido, abogó por la revolución de los biocombustibles y por la producción de biocarburantes,(esta parte si tiene sus orígenes en la Revolución Verde Imperialista) y en la que Brasil es el segundo productor mundial de etanol, por detrás de Estados Unidos (EE.UU.), pero es el primer exportador del planeta.Por su parte, el anfitrión de la cumbre, el líder libio Muammar Kadhafi, dijo que la idea de potenciar los biocarburantes le parece "interesante", con "la condición de que ello no se haga en detrimento de la comida".