En un intento de reeditar la extinta Coordinadora Democrática, que protagonizó el golpe de Estado de abril de 2002 en contra del Gobierno legítimamente constituido del presidente, Hugo Chávez Frías, y el sabotaje petrolero entre diciembre de 2002 y enero de 2003, que produjo a la nación pérdidas por el orden de los veinte mil millones de dólares, sectores opositores convocaron este lunes a una nueva plataforma «unitaria». El encargado de anunciar el nuevo intento de «unidad» fue el presidente de Copei Partido Popular, Luis Ignacio Planas, quien leyó este lunes, en rueda de prensa, un documento en el cual insistió en el llamado a la «unidad» a los seguidores de derecha y ultraderecha.
Esta coalición oositora apoyó el paro patronal de algunos sectores del país, y en especial incentivó el paro de Petróleos de Venezuela (PDVSA), causando pérdidas superiores a los 10 mil millones de dólares a la nación. El paro convocado por Fedecámaras y la CTV tenía como objetivo el derrocamiento del Gobierno democráticamente electo del presidente Hugo Chávez. En este contexto, Luis Ignacio Planas, al referirse a la Coordinadora Democrática dijo que «esto no pretende ser una reedición, aunque reconocemos los méritos que tuvo en su momento. Por cierto, me parece que forma parte del imaginario nacional la incunación de esta instancia con paros, golpes y asesinos en la calle, como se ha mencionado».Para el dirigente de Copei, la Coordinadora Democrática tuvo méritos (…) y no participó en la conspiración del paro patronal del año 2002. Desestimó todos los hechos de diciembre ocurridos el mismo año; según él, las cuñas a marchas, cacerolazos, manifestaciones, y las largas colas para comprar gasolina -que vivieron los venezolanos- no existieron nunca, sólo formaron parte del «imaginario» colectivo. El diputado venezolano ante la Asamblea Nacional (AN), Mario Isea, presentó este miércoles una grabación en la que se evidencia la elaboración de un plan para atentar contra la vida del presidente de ese país suramericano, Hugo Chávez, quien recientemente había denunciado estrategias similares, que asegura fueron orquestadas por el terrorista confeso Luis Posada Carriles.Las pruebas presentadas consisten en una grabación de audio de una conversación entre el presidente del derechista Frente Institucional Militar, Rafael Huizi Clavier y una persona de nombre «Edgar», donde plantea una conspiración contra el gobierno venezolano. «(…) La oposición no entiende que la lucha no es democrática, que es otra la lucha que hay que realizar», manifiesta Huizi Clavier en la grabación, al señalar su frustración, pues «seguimos en la misma vaina (asunto)».El diputado destacó que en la grabación se vislumbra el resurgimiento de la Coordinadora Democrática (CD), una asociación que en el pasado dirigía a las cúpulas opositoras del país, y que en el año 2002, impulsó un paro nacional que afecto sobremanera la economía venezolana. Indica que se ve venir una CD «con pretensiones de Junta Patriotica, la misma que actuó en el golpe de Estado de 2002 y el sabotaje petrolero. La CD ahora parece dividida, sin propuestas públicas claras».En el material los hombres plantean que hay que convocar a una dirección política de la oposición «sin cobardes, ni bates quebrados, como algunos políticos, entre los cuales cita a Gonzalo Pérez Hernández, y otros que se habrían escondido durante tres años o más, y vienen ahora a discursear. Plantean que Acción Democrática se debe incorporar».Durante la conversación de la grabación se citó varias veces a Antonio Ledezma, actual Alcalde Mayor de Caracas. También se planteó que la pasada marcha de los estudiantes «estuvo bien» y que la rectora de la Universidad Central de Venezuela (Cecilia García Arocha) «lo hizo muy bien (…) pero no pasamos de allí». El opositor Huizi Clavier afirmó en la conversación que «alguien debe convocar una gran vaina (…)», además de detallar que entre julio y agosto sería la fecha propicia para «adelantar esa gran vaina».A su turno, el personaje llamado «Edgar» afirmó que la oposición «parece no preparada para asumir la clandestinidad» y anunció otras reuniones. Se revela también que existen personas que trabajan, «preparándose para ir con todo, hasta verle el hueso al Presidente Chávez, porque ha señalado que hay una crisis del capitalismo». Afirman que el mandatario venezolano es «un imbécil que no entiende que en esos países los trabajadores tienen excelentes estándares de vida». Ante ello, el diputado venezolano Mario Isea indicó que «Nosotros no vamos a permitir que eso se concrete».»No lo vamos a permitir como Estado, como pueblo organizado. Vamos a responder con toda la fuerza de la organización popular, de las instituciones democráticas y la fuerza bolivariana de la revolución que impulsa el socialismo», agregó.Informó que la cinta será transmitida a la Asamblea Nacional (Congreso) para que se tomen las medidas pertinentes. Alertó al pueblo venezolano a estar atento ante cualquier circunstancia. «Vamos a plantear que se incorpore al expediente que está en la Fiscalía General de la República, producto de la investigación que hizo la Comisión Especial sobre Magnicidio y Golpe de Estado». El principal implicado en la cinta reveladora de los intentos de desestabilización del país, Rafael Huizi Clavier, desmintió este lunes su participación en la grabación.