Cargando...Entre abril y junio la economía española cayó el 0,4 % en tasa intertrimestral, una décima más que en el trimestre precedente, caída que llega al 1,3% en tasa interanual. Es consecuencia de la caída del consumo de los hogares, que cuentan con menos recursos para gastar y por el mayor debilitamiento de la inversión empresarial y en construcción. Antes de conocer estos datos, revisados a peor por el Instituto Nacional de Estadística, representantes tan destacados del sector de la distribución como los máximos responsables para Europa de Unilever y Leclerc mostraban su preocupación por el empobrecimiento de algunos países europeos, España entre ellos, a los que piensan aplicar técnicas de venta aplicadas en los países pobres y emergentes del mundo por su falta de poder adquisitivo.
Según Jan Zijderveld, director para Europa del gigante anglo-holandés de la agroalimentación y la cosmética, Unilever, la pobreza ha vuelto a Europa. Su empresa ha comenzado a vender en España el jabón para lavadoras en pequeños paquetes que solo permiten 5 coladas ante las dificultades de llegar a fin de mes de millones de familias. La entidad ha constatado la urgencia de replantearse los paquetes de productos alimentarios tras comprobar que en España y Portugal está aumentando el hábito de comprar yogures por unidades.
Unilever no descarta asimilar la estrategia de ventas en el sur de Europa a su actuación en Indonesia donde vende, por ejemplo champú, para un solo lavado. La crisis ha provocado que la media de la compra de los españoles en los supermercados, según Zijderveld, haya descendido de forma drástica hasta los 17 euros por lo que no se pueden vender paquetes de nada que supongan más de la mitad del total de una compra familiar.
El ejecutivo de Unilever no es el único que se muestra pesimista sobre la capacidad de compra de españoles, portugueses, griegos o irlandeses. Michel-Edouard Leclerc, presidente del grupo de distribución del mismo nombre, compartía la idea del ejecutivo holandés en una entrevista concedida recientemente al diario francés La Tribune donde afirma rotundo que ha comprobado la existencia de un movimiento de empobrecimiento muy claro del sur de Europa. .
En este mismo sentido hablarían los datos del Banco Central Europeo (BCE) difundidos este martes según los cuales los depósitos colocados en entidades financieras españolas han disminuido el 4,7 % en julio respecto al mes anterior. Es la mayor caída desde 1997.