Los retos de esta cumbre no son pocos. En una acción combinada las crisis políticas en varios países africanos se suman a la crisis económica mundial, ambas, pueden golpear fuertemente al Continente negro. Pero sobre la mesa está la propuesta más interesante en décadas: la instauración de un «gobierno de la Unión». Crear los Estados Unidos de África.
Los Estados Unidos de África son un reclamo del residente libio, Muammar Kadhafi. Una iniciativa que ya había empezado a discutirse en anteriores reuniones, con no pocas reticencias entre numerosos dirigentes de la organización. La fundación de los Estados Unidos de África, que se discute hoy en la cumbre, sería un paso cualitativo de extraordinario valor estratégico en la integración de la atomizada y disgregada África. El reto es si África va toma este camino y si, en caso de hacerlo, los Estados Unidos de África se van a parecer -en su conformación política- a la Unión Europea o, por el contrario, a la integración en Iberoamérica.Es decir, siguiendo los pasos de la UE, tomar un camino de reproducir las relaciones de dominio entre los países de la región en un supraestado. O, por el contrario, tomar el camino de la integración iberoamericana, a través de la solidaridad, el poyo mutuo frente a las principales potencias del planeta.Una y otra son dos vías antagónicas para el destino del Continente negro.¿Cuál es el principal escollo para la formación de los Estados Unidos Africanos?Justamente la intervención imperialista en África, de EEUU y Francia, que atenaza –en diferentes niveles y grados- a todos los países de la región.No existe ningún conflicto de envergadura (étnico, tribal, militar, rebelde…) que no tenga en su base la disputa entre París y Washington por el dominio del Continente y por el expolio de sus enormes recursos minerales, energéticos y agrícolas.Difícilmente de esta Cumbre que se celebra en Etiopía saldrán constituidos los Estados Unidos de África. Además de las fuertes reticencias de varios países, a la cumbre sólo han asistido 20 de sus 53 miembros.Sin embargo, el reto está sobre la mesa. Si hace una década nos parecía imposible que Iberoamérica se aliara en un Frente Antihegemonista de integración regional ¿Por qué no puede ocurrir lo mismo en África?No es fácil y menos tratándose de un continente intervenido hasta la médula. Pero la experiencia revolucionaria de los pueblos nos enseña que sólo desde la defensa de la soberanía nacional y la unidad de todos los países y pueblos contra el enemigo principal, se puede salir del “camino del infierno” del imperialismo.Y África no es la excepción.