La CIA sabí­a de los nexos de las fuerzas colombianas con paramilitares

Lo sabí­an y son responsables

Recientes documentos desclasificados en los EEUU revelan que «Las fuerzas de seguridad de Colombia cooperaban con grupos paramilitares que a su vez estaban vinculados con el narcotráfico». Pero lo más revelador es que estos documentos demuestran que la CIA ya lo sabí­a desde 1994.

Los documentos demuestran que la CIA y dilomáticos de alto rango de EEUU saben desde hace 14 años, que las fuerzas de seguridad de Colombia, apoyadas – estas sí oficialmente- por Washington, utilizan tácticas de "escuadrones de la muerte" y tenían nexos con los paramilitares.Entre las prácticas habituales de este binomio del terror (paramiliatres-ejército) está la de crear "falsos positivos". Como se hace explícito en los documentos desclasificados, es habitual presentar a los muertos civiles como guerrilleros muertos en combate. El ejército colombiano no sólo colaboraba – y se sigue colaborando- con los narcoparamilitares sino que habitualmente practica ejecuciones extrajudiciales y matanzas a civiles que luego presenta como guerrilleros muertos en combate.Pero esta es sólo la punta del iceberg, varios documentos del Pentágono revelan que desde los años sesenta Washington propugnó la creación del paramilitarismo en Colombia como medio para combatir las “guerrillas comunistas”. En línea con los manuales de los años 60 de las Fuerzas Especiales norteamericanas llamado “Operaciones de contrainsurgencia”.En Marzo del 2007 el diario Los Angeles Times publicaba que la CIA tenía claridad que el jefe del ejército de Colombia, Mario Montoya (que recibe respaldo de EEUU) colaboró ampliamente con los paramilitares, considerados por el mismo Washington una organización terrorista. ¿Si lo sabían, por qué se enviaron millones de dólares (700 por año) al ejército colombiano para el Plan Colombia de “lucha contra las drogas”? ¿Se puede saber que alimentas un asesino y ser inocente de cebarlo? Esta nueva desclasificación de documentos de la agencia norteamericana nos emplaza (al igual que en los casos del golpe a Chile o la dictadura Argentina) a reconocer que la CIA ha sido determinante en la organización, financiación, dotación, financiamiento y expansión de los paramilitares colombianos.Sólo entre 1982 y 2005 los paramilitares perpetraron más de 3.500 masacres. ¿Quién va a responder de estos crímenes? Deben hacerlo no sólo sus ejecutores directos sino también, principalmente, quienes desde Washington han financiado y dado cobertura a los asesinos.Sólo en el primer trimestre del 2008 unos 270.675 colombianos huyeron de sus lugares de origen, dejando atrás su casa, a causa de la violencia. Una cifra superior, por ejemplo, a la que se registró en el Chad por esas fechas. Los militares, paramilitares, el gobierno colombiano, pero también la CIA y su “sapiencia” deben responder de estos crímenes.Los documentos completos pueden consultarse en la página de Internet de National Security Archive, organización sin fines de lucro de la Universidad George Washington.

Deja una respuesta