El barómetro Sanitario 2008

Lo que tiene que cambiar en la sanidad pública

Ante la opinión pública nuestra sanidad, en general, sigue gozando de buena salud. En una escala de 1 a 10, la mayorí­a de los aspectos que analiza el Barómetro muestran una puntuación alta, por encima de 6 puntos y muchos de ellos con una calificación superior a 7.

Por ejemlo, frente a la necesidad de utilizar un servicio sanitario, los entrevistados se decantan en mayor proporción por el sistema público, frente a uno privado. Así ocurre en las cuatro opciones que se exploran: – atención primaria (62,9% frente a 31%), – consultas de atención especializada (47,9% frente a 43,6%) – ingreso hospitalario (59% frente a 33,4%) – urgencias (60,7% frente a 31,2%) Sin embargo ¿Cuáles son los aspectos peor valorados por las ciudadanos? Entre el 5 y por debajo del cinco están: el tiempo de espera en la sala de consulta o el que se tarda en hacer las pruebas diagnósticas. En cuanto a la atención especializada ambulatoria, los peor valorados son el tiempo de retraso en hacer las pruebas diagnósticas y lo que tarda el médico en ver al paciente desde que éste pide cita. En cuanto a la hospitalización, encontramos el tiempo de demora para el ingreso no urgente y el número de personas con las que se ha de compartir la habitación. Listas de espera: para el 50,2% de los encuestados la situación de las listas de espera no ha cambiado, tanto para consultas como para hospitalización. El 34,1% de los españoles cree que las autoridades sanitarias no están tomando iniciativas destinadas a mejorar las listas de espera. Como puede verse los aspectos peor valorados están íntimamente relacionados con los recursos y la gestión que se hace de ellos en la sanidad. Aspectos que con una inyección financiera, de personal, por una parte, y mejoras en la gestión, por otra, podrían ser corregidos. Eso sí desde otra voluntad política. “Se le están dedicando recursos insuficientes. Está más masificada, se ha recortado el número de camas hospitalarias y también el personal. Además, ha aumentado la población pero la financiación sigue siendo escasa” afirma, Javier Rodríguez Medel, de la federación de asociaciones para la defensa de la sanidad pública. Es necesario dotar a nuestra sanidad de más y mejores recursos (financieros, técnicos y humanos) para atender las necesidades de los ciudadanos. Que se ahorren gastos del Estado y las autonomías en coches, viajes, dietas, trajes, remodelación de despachos… y que se reinvierta en la mejora de la sanidad pública. Hay que denunciar como los intentos de privatizar la sanidad (como en el caso de Madrid, Valencia, Murcia…) conducen a un abandono progresivo de la pública para justificar ante la sociedad las privatizaciones graduales o los centros concertados. En las comunidades mencionadas el gasto per cápita sanitario es menor que en el resto de comunidades. Pero no sólo existe una relación directa entre la inversión y el servicio, también en estas comunidades se han privatizado una serie de servicios diagnósticos o ambulatorios. Sin embargo, llama la atención que en autonomías como Madrid o Valencia, según los resultados del barómetro, aumente preferencia por la atención primaria pública.

Deja una respuesta